El Consejo de Política Monetaria del Banco Central (BCRA) mantuvo este martes sin cambios la tasa de referencia monetaria (el centro del corredor de pases a 7 días) en 40%. A ese nivel había subido el 4 de mayo, como parte de un combo de medidas anunciadas por el gobierno hace un mes para intentar frenar la corrida cambiaria. La entidad conducida por Federico Sturzenegger justificó la decisión ante señales de “una aceleración” inflacionaria en junio.
"Si bien el mes de mayo puede mostrar un número de inflación más bajo que el anticipado por el sector privado, dicha baja se debe, primordialmente, a una menor incidencia del componente regulados. Los indicadores de alta frecuencia muestran una aceleración de la inflación de junio”, señaló el CPM en un comunicado.
El texto del organismo sostuvo que “las expectativas de inflación captadas en el último Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) presentaron para 2018 un aumento de 22% a 27,1% en la inflación general y de 19,8% a 25,1% en la inflación núcleo, con aumentos también significativos en las expectativas de inflación a 12 meses y para 2019” y fundamentó que “este panorama exige una respuesta decidida”.
La institución se comprometió además "a mantener el sesgo contractivo de la política monetaria hasta observar signos tangibles de que tanto la inflación como las expectativas de inflación comienzan a descender".
En cuanto al corredor de pases, el organismo decidió reducir el ancho del corredor a 7 días de 1.400 a 600 puntos básicos, y el de 1 día de 2.900 a 1.000 puntos básicos “como parte del proceso de normalización de la política monetaria”. Así, indicó que las tasas “quedan determinadas en 43% para el pase activo y 37% para el pase pasivo en el pase a 7 días, y en 45% para el activo y 35% para el pasivo en el pase a 1 día”.
En el comunicado, el Consejo de Política Monetaria recordó las nuevas metas inflacionarias estipuladas a partir del acuerdo con el FMI anunciado el jueves último que contemplan pautas del 17% en 2019, 13% en 2020 y 9% en 2021.
“El BCRA considera que estas son las metas adecuadas, dado el punto de partida, para el nuevo contexto, pero que a la vez obligan a ser muy estrictos en materia de política monetaria”, planteó.