Los empresarios ven indicios de una “ligera recuperación" de la economía” para el segundo semestre del año, al tiempo que identifican a la inflación y a la política impositiva, entre los principales factores que traban la competitividad del país, y tienen inquietud por el dólar
Además, para los ejecutivos de empresas, la estabilidad institucional sigue figurando como el principal factor para atraer inversiones al país.
Así surge de de la última Encuesta de Ejecutivos presentada este jueves por el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA),realizada entre el 12 y el 21 de julio a unos 250 directivos de empresas de distintos sectores
El relevamiento fue presentado en una conferencia virtual por el consultor Eduardo D’Alessio, de D’Alessio Irol, y el economista Santiago Bulat, quienes aseguraron que como las elecciones legislativas de noviembre tendrán "mucha influencia" en la opinión de los ejecutivos, por ese motivo la próxima encuesta que tradicionalmente se realiza en prevista para octubre, este año se efectuará en diciembre, una vez que esten los resultados de los comicios.
“Lo electoral lo invade todo”, alegaron.
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Recuperación económica argentina
Al evaluar la marcha de la economía en el primer semestre del año, el 12% de los encuestados consideró que fue mejor que lo previsto y 69% fue peor; mientras que la perspectiva para los próximos seis meses evidencia una tenue mejoría, dado que el 14% percibe que la situación será mejor,frente a un 64% que espera un empeoramiento.
En ese sentido, D’Alesio destacó los más pesimistas son los sectores de los servicios, que fueron los más golpeados durante la pandemia
El sondeo arrojó que los que creen que les va a ir mejor es básicamente por la mayor apertura de actividades por levantamiento de restriccciones, y leve recuperación del ingreso por paritarias
En cambio, los de visión negativa “hablan de la inflación, de la falta de un plan económico, incertidumbre, dólar -unos hablan del cepo, otros de que está atrasado el tipo de cambio- la gestión de la pandemia, la presión tributaria, el aumento del gasto público, y el cierre de la economía”, detalló.
Bulat planteó que “hay un poco de incertidumbre hacia donde va esta eventual recuperación, si este año terminamos de recuperar este 7% que todos están esperando todavía estamos muy lejos de aquel pico de 2017; todavía para la economía realmente recuperar desde que empezó la crisis de 2018 falta mucho”.
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“Vemos los servicios muy afectados y la industria de bienes que ya empezó a recuperar parte de lo perdido. Es una crisis que todavía vemos que durante los últimos meses empezó más a estancarse que a confirmar esa recuperación que por ahí se está viendo en otros lados. Argentina y Colombia son de las economías de la región más afectadas”, agregó el economista
Al responder los empresarios sobre las expectativas de ventas, las exportaciones, el empleo y la rentabilidad, "en todos los casos el saldo neto es negativo, pero menor al de octubre de 2020", señaló D’Alessio.
La suma de las respuestas que esperan mejoras o al menos un mantenimiento en las exportaciones llega al 75%. “El horizonte de exportaciones no manifiesta cambios”, sostuvo el consultor.
Ventas, inversión y condiciones económicas
Cuatro de cada diez entrevistados espera alguna evolución positiva de sus ventas, las que parecen haber llegado a un piso.
En cuanto a que cree que sucederá con la inversión en su empresa dentro de doce meses, el balance entre la proporción de los que aguardan un aumento y una disminución es negativo, pero en menor medida que el sondeo anterior de octubre.
Al ser consultados sobre las condiciones que creen importantes para incentivar la inversión, los empresarios mencionaron la estabilidad institucional, la revisión del marco impositivo y de marco laboral, e incentivos fiscales, entre otras medidas.
“La inversión depende mucho más del entorno que de los negocios o de la situación del mercado interno”, subrayó D’Alesio.
En cuanto a las medidas para aumentar la competitividad del país, reclamaron: reforma impositiva, bajar la inflación, buen funcionamiento de las instituciones y la justicia, y reforma laboral, entre otras.
Empleo y rentabilidad
En cuanto a las expectativas del nivel empleo, también es superior quienes esperan que disminuirá frente a los que prevén un aumento, con lo cual el saldo también es negativo,aunque en un guarismo inferior a la encuesta anterior.
D’Alesio indicó que entre la medición de octubre y la de julio el balance entre las respuestas “pasa de -25 a -16, o sea que empieza un freno a la caída de empleo privado”, y remarcó que “hay una ligera tendencia más de las pymes a tomar personal que de las grande empresas”.
Son mayoría las empresas que ven cantidad de rentabilidad, aunque hay una menor incidencia, ya que el balance entre las mediciones entre octubre de 2020 y julio de este año pasó “de -48 a -39”.
A la hora de responder qué factores consideran importantes para el mantenimiento del nivel de empleo o generar nuevos puestos laborales, los ejecutivos apuntaron a: cambios en las condiciones de contratación, incentivos fiscales, trabajo conjunto de sector público y privado mayor diálogo con sectores gremiales, y revisión de políticas de primer empleo, entre otros.
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“Se agudizan los factores fiscales y de legislación laboral como barreras para el aumento del nivel de empleo” destacó Bulat, quien abogó para mejorar el empleo “por más capacitación que permitan una inserción laboral mayor, y romper los conflictos permanentes que se ven entre empleados y empleadores, para hacer más fácil la contratación”
Entre otros datos que arrojó la encuesta de IDEA sobresale que para la mayoría de los ejecutivos "el teletrabajo vino para quedarse" aun luego de superada la pandemia, al punto que el 91% de las empresas cree que desarrollará alguna modalidad en ese sentido, en tanto que el proceso de aumento de transformación digital abarca prácticamente a la totalidad de las empresas, y es visto como un fenómeno irreversible.