Los datos sobre empleo registrado en abril –el primer mes completo de aislamiento social– muestran una caída de 364 mil trabajadores contra el mismo mes del año anterior. Pese a las medidas para contener el impacto, como el decreto antidespidos y los planes para sostener la actividad privada, en la comparación con marzo, hubo 186 mil trabajadores menos.
Esa cifra representa “una disminución de 1,6% en el total de trabajadores registrados, la caída más alta desde el comienzo de la serie”, según el Ministerio de Trabajo.
Así lo señalan los datos oficiales del SIPA, el Sistema Integrado Previsional Argentino. “Una parte se explica por cuestiones estacionales, pero aún despejando esos factores la magnitud de la caída fue de casi el triple del peor mes anterior, que fue marzo de 2020”, señala un análisis a cargo del Observatorio del Derecho Social de la CTA Autónoma, que dirige Luis Campos. Sin la estacionalidad, la caída fue de 128 mil puestos de trabajo. “Las medidas de amortiguación no impidieron el porrazo”, evaluó.
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El empleo viene cayendo desde abril de 2018, sin embargo, el mayor salto hasta ahora había sido en marzo. Las perspectivas para mayo no son buenas. Las suspensiones alcanzaron al 8,8% de los trabajadores registrados del sector privado, un poco por encima del dato de abril, anticipó el especialista en empleo de la CTA-A.
Sectores. La caída del empleo asalariado fue generalizada. Los sectores de mayor baja fueron Construcción (-4,6%), Hoteles y restaurantes (-1,7%), Servicios sociales (-1,4%), Transporte y Servicios empresariales (-1,9%), Enseñanza (-1,8%) y Comercio (-1,3%).
Los sectores definidos como esenciales, como los servicios de Salud, Intermediación financiera, el conjunto de actividades primarias, a pesar de haber registrado caídas del empleo, fueron los menos afectados, remarcó la cartera que dirige Claudio Moroni.
La caída del empleo se explica por la decisión de las empresas de no realizar contrataciones de personal. No alcanzaron a compensar las desvinculaciones -que cayeron un 60%-. Si bien también se desplomaron en relación a sus registros históricos, lo hicieron en menor medida”, agregó Trabajo. En el marco del acuerdo UIA-CGT, 60 mil empresas suspendieron trabajadores.
Para Campos, “es difícil evaluar si las medidas adoptadas por el gobierno impidieron un retroceso del empleo aún mayor al verificado y en qué magnitud. El primer mes de cuarentena arrancó con un golpe durísimo y no parece haber sido el último”.
“La crisis internacional provocada por la pandemia del coronavirus no tiene antecedentes recientes, ni por la magnitud de la caída de la economía y el empleo, ni por el alcance global que está mostrando. La duración y profundidad de los efectos en la economía mundial todavía son inciertos. La Argentina no se encuentra exenta de este escenario”, enfatizó la cartera laboral.
