Según un informe de los grupos CREA (Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola) ya habría unos 8 mil puestos afectados.
En el mismo se advierte que “la industria frigorífica atraviesa una situación crítica, dada principalmente por la falta de hacienda lo que genera gran capacidad ociosa”, según publicó Clarín. Esa capacidad ronda el 40% por la falta de materia prima. Esta situación provocó que se cierren entre 20 y 25 plantas. Con respecto a igual lapso del año anterior el descenso del número de cabezas faenadas llega al 23% en el período enero-junio de 2010.
A pesar de que el objetivo del Gobierno, a través de la intervención, intentó bajar los precios, el valor del kilo vivo de la hacienda vacuna está cerca de los US$ 2 el kilo.
La crisis por la que atraviesa el sector cárnico, con falta de oferta vacuna y altos precios en el valor de la hacienda, provocó una fuerte caída en el consumo, que se desbarrancó de los 71 kilos per cápita en noviembre de 2009 a 56 en la actualidad. Y está modificando la canasta de alimentos ya que sube el consumo y el precio del pollo (en el último mes aumentó 8%) y el de pastas.
Este presente hace que no haya interés para que lleguen nuevas inversiones. Ahora es el gobierno nacional quien analizaría la posibilidad de gestionar ante los propios municipios la reapertura de las plantas inactivas.
