Poco más de una semana después de que la presidenta Cristina Kirchner recordara la causa por lavado de dinero que involucra a parte del Grupo Clarín, un vuelco judicial posibilita a la AFIP ser querellante en el llamado JP Morgangate. De esta forma, el oficialismo podría abrir un nuevo frente de batalla con el multimedios en la Justicia y se sumaría a otras contiendas como la que libraron por la Ley de Medios y la avanzada de Guillermo Moreno en Papel Prensa.
Fuentes judiciales y del Gobierno dejaron trascender ayer la información de que la Cámara en lo Criminal y Correccional Federal hizo lugar al pedido del organismo que comanda Ricardo Etchegaray y revocó el fallo del juez Sergio Torres que impedía a la AFIP acceder a la causa en la que se investigan las presuntas maniobras de fuga de capitales que realizó para clientes argentinos, entre ellos varios directivos y familiares de Clarín, el ex ejecutivo del JP Morgan, el segundo banco más importante de los Estados Unidos, Hernán Arbizu.
La Cámara hizo lugar a los argumentos de la AFIP, que en los fundamentos de la apelación sostuvo que el fisco, en “su carácter de legítimo interesado en el ejercicio de las facultades que legalmente le han sido asignadas de fiscalizar, verificar y determinar tributos de los ciudadanos en general”.