Desde la semana pasada, el Mercosur volvió a ser noticia para la Argentina y la región cuando se cumplieron los 30 años y hubo -virtualidad mediante - una reunión entre los jefes de Estado de las naciones miembros para celebrar el aniversario.
Un cumpleaños que no dejó mucha alegría no sólo por los chispazos entre el presidente Alberto Fernández y el de Uruguay, Luis Lacalle Pou; sino porque además el bloque en la actualidad comercializa sólo la mitad de hace una década. Con lo cual, más allá de las rispideces por el concepto de "lastre", son varios los puntos sobre los que debe trabajar el bloque para volver a ser ese "motor" que fue en los comienzos.
"Los primeros 20 años fueron años de crecimiento muy fuerte para Argentina que quintuplicó sus exportaciones dentro del Mercosur, pero luego se detuvo y hoy la Argentina exporta nominalmente la mitad de lo que le exportaba hace 10 años", detalló el consultor de empresas Marcelo Elizondo en diálogo con PERFIL, y también detalló que el bloque hoy "sigue siendo un mero acuerdo de reducción arancelaria entre socios".
Según su mirada, los demás socios se dan cuenta de esto, y piden bajar el arancel externo para que no sea tan caro acceder a tecnología, a bienes de capital calificado y a insumos sofisticados, como también piden abrir mercados externos mediante acuerdos de libre comercio, pero "Argentina no está tan de acuerdo con esto y ve más una amenaza del mundo para nosotros que una oportunidad nuestra y ese el eje de discusión", detalló.
Para Elizondo, "hoy lo que está en juego más que ideología son los resultados que muestran un Mercosur que se achica. Si se realiza una comparación entre el PBI de los cuatro países sumados, con las exportaciones totales del Mercosur, ese ratio (Producto Bruto / Exportaciones) es el más bajo de todos los ratios de todos los bloques vigentes en el mundo", aseguró.
El Reino Unido propuso en Uruguay un acuerdo con el Mercosur
Así, mientras el Mercosur exporta el 15% de lo que produce (a todo el mundo); la UE exporta el 50% de lo que produce; el Caricom (en el Caribe) exporta el 75% de lo que produce, por ejemplo. "El promedio de los 20 acuerdos de libre comercio vigentes en el mundo es 33%.
"Pero, el bloque está generando muy poco resultado en la inserción externa. Brasil y Uruguay se dan cuenta y quieren abrir, pero Argentina no quiere. Lo que se discute creo que es el modelo en función de los malos resultados, no de ideologías o postulados", expresó.
Para Elizondo, todo se dirime en una decisión política y especificó que entre otras cosas el bloque tiene por delante discutir al menos 3 cosas:
1) Si se va a bajar el arancel externo: El promedio en Mercosur es 13% mientras en el mundo es 5%.
2) Qué hacer con los acuerdos con terceros que el bloque en conjunto tiene en negociación (UE, EFTA; Corea del Sur, Canadá, Singapur, entre otros).
3) En el caso que no estén todos los miembros de acuerdo, ver la factibilidad de que cada país miembro tenga flexibilidad y resuelva con autonomía.
¿Se puede pensar en un acuerdo Reino Unido - Mercosur?
"Creo que Brasil, Paraguay y Uruguay podrían adherir a la posibilidad de un acuerdo con el Reino Unido, pero probablemente habrá que ver si la Argentina suele ser menos entusiasta a esta reforma del Mercosur, en este modelo autonomista y endocéntrico", mencionó Elizondo.
Para el consultor, el Reino Unido tiene expectativas de generar un acuerdo de Libre comercio con el bloque e incluso consideró que la negociación podría ser más sencilla que con la Unión Europea. "Se que les entusiasma mucho la idea, incluso he hablado con autoridades diplomáticas (de Reino Unido) y me han dicho que les gustaría aplicar los mismos criterios de la negociación Mercosur - UE, y es probable que tuvieran incluso, menos reparos que la UE, ya que esta tiene algunas restricciones de política agropecuaria, sobre todo, que el Reino Unido no tiene", mencionó.
Sin embargo, lo primero para el analista será resolver hacia adentro esta diferencia de visión que hay entre Argentina y el resto, que según indicó: "o se resuelve generando un nuevo consenso para mayor apertura o el Mercosur deberá encontrar mecanismos que le permitan a algunos miembros avanzar en negociaciones mientras otros -como Argentina-, no acompañan", explicó.
Elizondo detalló que para que eso ocurra será necesario modificar las normas vigentes del Mercosur. "Lo que habría que hacer es reformar el Tratado de Asunción (que es el constitutivo) o esa Decisión 32 del año 2000 que impiden que haya acuerdos que no sean para todos". indicó.
De reformarse, Elizondo mencionó como posibles dos alternativas: una que haya algunos miembros del acuerdo que firmen pactos con terceros y otros que no acompañen; y otra alternativa es que todos lo firmen, pero que el tiempo de implementación varíe, lo que sería una salida menos tortuosa. Pero en cualquier caso "eso requiere una decisión política previa de marco jurídico que debe discutir el bloque en relación a este y a cualquier otro acuerdo que hay en negociación como India, Corea del Sur, Singapur, Canadá, El Líbano y alguno más", dijo.
En cuanto a las posibilidades reales del acuerdo con Reino Unido, Elizondo lo ve muy viable. "En primer lugar porque el Reino Unido es una economía muy abierta, con mucha vocación de libre comercio, en segundo lugar porque habiendo salido de la UE, tiene la política del 'global britain' de hacer acuerdos con el mundo y que busca en especial a los emergentes; en tercer lugar Brasil es en particular un mercado atractivo para los países desarrollados en general y en cuarto porque hay mucha complementariedad. Reino Unido es un gran mercado para nuestras carnes y vinos históricamente y a la vez son inversores en el resto del mundo"
"Incluso lo veo más sencillo que hasta la finalización del acuerdo con la Unión Europea", aseguró pero también recordó que depende de pasos previos que debe dar el Mercosur y que no son sencillos.
Cómo será el rol de Argentina en el Mercosur
Para Elizondo, la Argentina es el eslabón más débil en la cadena de hoy. "Si dijera que está de acuerdo con un acuerdo con Reino Unido, probablemente los otros tres dirían que están de acuerdo también", dijo y aclaró: "Argentina no lo dice, no está claro lo que piensa, porque no dice 'yo no quiero negociar con nadie', pareciera que con Canadá si, por ejemplo pero con otros pareciera que no. No queda clara cuál es la posición", recalcó.
En cuanto a las posibilidad de comercio que podría abrir un acuerdo con Reino Unido, Elizondo mencionó que no sólo habría que pensar en alimentos (vinos y carnes tienen una gran llegada), sino que también se podría explorar el rubro de servicios. "El 80% del PBI del Reino Unido son servicios y yo creo que hay posibilidades de cooperación e interacción para proyectos comunes de empresas argentinas y británicas muy interesantes"; detalló.
Además destacó que, de generarse un acuerdo no debiera ser un "acuerdo viejo" como el que se discute con la UE, que es básicamente reducción de aranceles. "Hoy los acuerdos de libre comercio en el mundo, además de reducir aranceles avanzan en otro tipo de confluencias normativas para permitir interacciones en materia de servicios, respeto de estándares de calidad, normas técnicas y certificaciones, normas que garantizan el desarrollo de la propiedad intelectual o lo relativo a la economía digital, por ejemplo. Hay que pensar en un acuerdo 'nuevo'", expresó.
El comercio, apenas una de las 6 caras de la globalización
Lo que queda claro al hablar con Elizondo es que el mundo avanza, al ritmo de una globalización que no espera y como el bien explica, el comercio internacional avanzó mucho en los últimos años pero es sólo una parte de la globalización, que es un fenómeno más integral.
"Tiene 6 lados: uno es el comercio internacional de bienes, otro el de servicios (que hoy crece más que el de bienes); el tercero son los flujos de inversión extranjera directa (empresas que se instalan en otros países); cuartos los flujos de financiamiento privados para proyectos privados (fondos de inversión que invierten en proyectos productivos en otros países), quinto el flujo de datos e información (capital intelectual); y sexto las migraciones que ya no son sólo físicas sino digitales (cada vez más gente trabaja)", expresó.
En este escenario, explicó que los países que más acuerdos internacionales de libre comercio tienen, mejor se desenvuelven en este marco de globalización.
Aún en plena pandemia hubo tres grandes acuerdos en el mundo. "Entre noviembre y diciembre hubo 3 acuerdos de libre comercio, uno firmado entre Reino Unido y Unión Europea: el RCEP entre las principales economías asiáticas que hoy generan el principal bloque de comercio abierto del mundo; y un acuerdo de protección de inversiones entre China y UE".
Una síntesis clara de que el mundo sigue avanzando y "los que celebran acuerdos de libre comercio trabajan con más previsibilidad, con más garantías", concluyó Marcelo Elizondo.