El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, destacó esta tarde el rol del G20 como un “verdadero éxito” y llamó a "mantener vivo" al bloque. "En todos los países del G20 hay una visión muy fuerte de que hay que mantener vivo este grupo y funcionando en armonía. En los malos tiempos se ve lo crucial que es", sostuvo el funcionario nacional en el cierre de la cumbre.
En conferencia de prensa en el Centro de Exposiciones y Convenciones (CEC) de la Ciudad de Buenos Aires, Dujovne aseguró que la reunión de ministros de Finanzas logro varios consensos y recordó el importante rol del G20 durante la crisis económica mundial de 2008. "El G20 es un foro en el que prima el diálogo constructivo. Se sigue apoyando al comercio como fuente positiva de creación de prosperidad", manifestó el ministro de Hacienda.
Sobre el comercio, el ministro de Hacienda y Finanzas aseguró que “tuvimos un diálogo en donde reafirmamos que el comercio y la inversión son motores de crecimiento, innovación, productividad, desarrollo y creación de empleo. En relación a la infraestructura para el desarrollo, los participantes aprobaron un conjunto de pautas de preinversión para proyectos atractivos para inversores privados con un enfoque en la eficiencia y la viabilidad.
Sobre los temas propuestos por el país en cuanto al futuro del trabajo, los funcionarios respaldaron un conjunto de políticas públicas diseñadas para maximizar los beneficios y superar los desafíos planteados por las transiciones tecnológicas. En esa línea, el ministro explicó que dentro de las prioridades de la presidencia Argentina del foro es "trabajar sobre el futuro del trabajo". "Queremos aprovechar el cambio tecnológico para promover el crecimiento y que sea más inclusivo”, afirmó.
Para lograrlo, Dujovne sostuvo que se plantearon cuatro objetivos principales, que consisten en “aprovechar la tecnología para fortalecer el crecimiento y productividad de las firmas, apoyar las personas durante la transición para hacer frente a los desafíos distributivos, asegurar sistemas impositivos sostenibles, y contar con los mejores datos para la toma de decisiones” aseguró.
Por su parte, el presidente del Banco Central, Luis Caputo, contó que durante la jornada "se habló de inclusión financiera, y se hizo mucho hincapié en las nuevas tecnologías, con todos los beneficios y los eventuales riesgos". Al tomar la palabra, el titular del BCRA explicó que la segunda prioridad de la presidencia argentina del G20 fue “cómo atraer mayor financiamiento y capital en las inversiones en infraestructura”, lo que definió como un problema que afecta “a todos los países y todos los mercados, porque cada vez hay mayor demanda de infraestructura”.
Caputo manifestó también que "la mayoría de los países enfrentan una situación similar de tener presupuestos reducidos”, para lo que propuso facilitar la inversión. “El sector privado está dispuesto a financiar cada vez más, pero hay que facilitar esa inversión. El objetivo final es convertir a infraestructura en una clase de activo, para lo que hay que convertirla en un proyecto fácilmente analizable y estandarizable”, detalló.
Para eso, el funcionario sostuvo que “hay que lograr que los contratos financieros sean más estandarizados para que sean más comerciables, para que luego sean una clase de activos. Una vez que se llega a esa categoría, se vuelve mucho más fácil que los fondos institucionales inviertan plata, y sería en definitiva la solución buscada”, sostuvo en conferencia de prensa.
El presidente del Banco Central resaltó además que se hizo hincapié en las nuevas tecnologías. "También se habló de los criptoactivos. El consenso es que no imponen un riesgo global al sistema financiero, pero hay que tener mucho control y ver lo que tiene que ver con actividades ilícitas", declaró.
