Tras un retiro voluntario de los medios, la paciencia rural va llegando a su límite. Los líderes de las entidades agropecuarias volvieron a la primera plana política. Ayer se reunieron con diputados oficialistas y opositores en el Congreso con un saldo "positivo", criticaron al secretario de Agricultura, Carlos Cheppi, por armar reuniones "para la tribuna", y solicitaron una audiencia con la Presidenta.
Esta mañana, su reclamo siguió en los medios: Eduardo Buzzi, de la Federación Agraria, y Luciano Miguens, de la Sociedad Rural, se quejaron por radio de la actitud del Gobierno.
"Lo que quiere el campo es simplemente poder conversar y estar en contacto con el sector oficial", indicó Miguens a radio América, al tiempo que subrayó que "la promesa de tener reuniones semanales para tocar los temas más urgentes no se cumplió".
El hombre que recibió una oferta del PRO para sumarse a la política como candidato en 2009, expresó que el sector agropecuario se siente "realmente apartado" por el Gobierno y que "en los nueve meses que van de este año, no hubo posibilidad de empezar a buscar soluciones a muchos de los temas que fueron reclamados durante los meses anteriores".
Eduardo Buzzi explicó que la Mesa de Enlace solicitó una audiencia con la Presidenta porque "no se puede hablar con nadie del Poder Ejecutivo y están esquivando" el diálogo con el campo. Buzzi reiteró que "la situación de los productores es muy complicada y crítica", visión que es tomada en cuenta por la oposición e ignorada por el oficialismo, añadió en radio Continental. "Nos parece importante pedirle una entrevista a la presidenta de la Nación, por la sequía y por todos los problemas del campo", resumió.
El que ya tiene decidido volver a las rutas es Alfredo De Ángeli, el titular la Federación Agraria de Entre Ríos, que hoy encabeza un camionetazo frente a la Legislatura de su provincia para protestar contra el aumento en el impuesto inmobiliario rural.
Esta semana también se definirá si el campo se moviliza al Congreso de la Nación en reclamo de una pronta respuesta por parte del Gobierno, que por el momento no logra satisfacer los pedidos de los ruralistas.
