ECONOMIA
carne vacuna

Por los precios en baja, liquidan más hembras

Terminó la retención de vientres, que duró 27 meses. Los especialistas advierten que debería haber durado tres años para ser sustentable. Costos en alza, baja inversión.

Cara. La tonelada de carne argentina no puede competir afuera.
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Los números tienen lógica propia. En 2005 la Argentina exportó 750 mil toneladas de carne, sobre una producción total de 3,2 millones. Este año se estima que se exportarán, con suerte, 200 mil toneladas, de una producción total que no superaría los 2,5 millones. ¿Qué pasó en el medio? El vendaval de la fuerte liquidación de stock (especialmente hembras), que generó una disparada de los precios en 2009.

Miguel Schiariti, titular de la Ciccra (Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina), argumenta que en ese momento “todos los que leemos el mercado nos atrevimos a pensar en cinco o seis años de recuperación de precios, mientras se recuperaba el stock”. Sin embargo, para los industriales de la carne, ese período no fue más que un flash que duró hasta mediados de 2012 cuando se estabilizaron los precios y en 2013 empezaron a caer. “Tuvimos 27 meses de retención de vientres, con una faena de hembras menor al 43%, que es el punto de equilibrio. Pero, desde hace ocho meses, la faena está llegando al 43%. Este número nos indica que se terminó la retención de vientres”, adelantó.

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¿Por dónde pasa la decisión de 220 mil ganaderos del país que deciden retener o vender? Para Schiariti es claro: en 2010, cuando la actividad era rentable y las expectativas a mediano plazo eran promisorias, el productor tomó la decisión de guardar hembras”, aunque debería esperar un mínimo de tres años hasta vender como ternero para recría el resultado de retener esa madre. El problema es que en el medio los precios se plancharon y hasta se deprimieron. “Hoy el precio del ternero nominalmente es entre $ 2 y $ 3 más bajo que en 2010, cuando el kilo era de $ 13 o $ 14”, alerta Scharitti, quien además suma el aumento de costos. “Esta es la racionalidad del productor, que dice: no rentengo más y vendo, incluso con algo mucho más grave, y es que también dejó de invertir en aguadas, verdeos, etc., lo que hará caer más su productividad”.

Para los industriales, el grave problema es el atraso cambiario. “La pérdida de competitividad que implica, sumada a las retenciones (15%), que hayamos perdido los mercados de volumen como Rusia, Venezuela, países árabes y del norte de Africa”. Esto indica que el escaso 6,5% de carne que el país vende hoy afuera es a mercados de alto valor, entre ellos las 30 mil toneladas emblemáticas de la Cuota Hilton, que por quinto año consecutivo en 2013 tampoco se va a cumplir.

Hoy no hay problemas para conseguir ROEs (permisos para exportar) pero tampoco la carne local tiene un precio atractivo para el comprador. “La tonelada de carne argentina hoy es entre US$ 800 y US$ 1.000 más cara que la de cualquier competidor, incluido el Paraguay, que ya exporta más carne que nosotros”, se lamentó Schiariti.

En un mercado internacional demandante de proteína animal, del que se estima en los próximos 15 años pasaría de los 7 mil millones de toneladas a los 11 mil millones por el ingreso al consumo de la clase media, la Argentina se quedó sin nafta. Pasó de ser el tercer exportador mundial al décimo.

 

Las ventas al exterior caen fuerte por el tipo de cambio

El consumo de carne vacuna por habitante se ubicó en abril en 60,7 kilogramos/año, lo que implica una suba de 8,3% interanual, indicó un informe de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra), que advirtió que la situación actual de la industria frigorífica es “francamente preocupante”.

La entidad atribuyó esa situación al atraso cambiario, las retenciones y la falta de controles en el mercado interno que incrementó la marginalidad de las operaciones, en tanto alertó que la producción nacional se vio sometida a una “continua pérdida de competitividad que la fue marginando del mercado internacional”.

El informe precisó que las exportaciones se retrajeron 27,7% interanual, en tanto remarcó que el consumo interno absorbió en el primer cuatrimestre del año el 93,6% de la producción total de carne vacuna; y es el segundo guarismo más elevado de los últimos 53 años.

En el primer cuatrimestre del año, la faena de hacienda vacuna totalizó 4.136 millones de cabezas, lo que representa una suba de 12,9% interanual.

En el primer cuatrimestre del año se produjeron 917 mil toneladas res con hueso (tn r/c/h) de carne vacuna, lo que representa un alza de 10,2% interanual.

En cuanto a las exportaciones, detalló que las ventas externas de carne vacuna totalizaron 13.873,4 toneladas res con hueso, es decir una baja de 27,7%interanual.