Desde el ajuste del cepo cambiario se percibe un temor por parte del público a que el gobierno imponga un corralito sobre los depósitos en dólares. En otras palabras, que los actuales límites a la compra de dólares se extiendan al acceso a los dólares propios.
Otro temor es un canje compulsivo de los depósitos en dólares. El gobierno confisca los dólares y ofrece a cambio algún tipo de bono. Estos temores llevan a un retiro de depósitos que pueden llevar a problemas financieros.
Sin embargo, a pesar de todo lo que está sucediendo con la economía del país, algunos sostienen que estos miedos son infundados.
No habría motivos técnicos para temer un corralito a los depósitos. Después de todo, los dólares están disponibles en los bancos para los depositantes. No sería necesario, entonces, apurarse a retirar los mismos. Algunos temen que una aceleración de retiros lleve a una profecía autocumplida en el sistema financiero.
Sin embargo, los fundamentos técnicos no son la única manera de explicar, de manera racional, el comportamiento de los depositantes. De poco sirve lo que digan los balances de los bancos si mañana amanecemos con un nuevo DNU que confisca los depósitos en dólares.
¿Confiamos en que la oposición tenga éxito en defender los depósitos privados? ¿O que el Poder Judicial intervenga a tiempo? En definitiva, lo importante no es lo que dicen los balances de los bancos, sino si el público cree que el gobierno necesita de sus dólares.
Es natural que el público, que no tiene porque ser experto en banca, dinero y finanzas, tenga temor sobre la seguridad jurídica de sus depósitos cuando percibe que el gobierno necesita dólares.
Sin corralito: aseguran que hay respaldo para los dólares en los bancos
Los temores del público no están alimentados por balances bancarios difíciles de leer, están alimentados por los propios actos del oficialismo.
¿Si el gobierno no necesita dólares, por qué llevar a los actuales extremos el cepo cambiario? ¿Si el canje de deuda fue un éxito y una lección al mundo de cómo solucionar una crisis de deuda, por qué no puede el gobierno acceder a dólares frescos?
El ministro Guzmán, en principio quien traería algo de racionalidad económica al gobierno, fue descalificado tan solo 48hs luego de sostener que no se iba a incrementar el cepo cambiario. Si las decisiones económicas no las toma el Ministro de Economía, ¿quién las toma y en base a qué principios o ideas? ¿O lo que tenemos enfrente es un caso de descoordinación económica entre Hacienda y el BCRA?
Sin embargo, las decisiones en torno al cepo cambiario no son las únicas señales que producen un miedo racional a los depositantes. No hace tanto tiempo atrás, bajo el anterior gobierno K, se confiscaron empresas como Repsol y los ahorros privados en las AFJP.
El actual presidente no se cansaba de desvirtuar y mal interpretar las negociaciones que llevaba adelante con la Mesa de Enlace en torno al conflicto de la Resolución 125 cuando era Jefe de Gabinete. Hace tan sólo semanas atrás (aunque nos parezca un tiempo lejano), vimos el intento injustificado de tomar posesión de Vicentín, una empresa privada, metiéndose en el medio de un proceso judicial en marcha.
¿Acaso las repetidas expresiones donde se afirma que debemos acostumbrarnos a ahorrar en pesos ya que los dólares son para producir no envían un claro mensaje de que el gobierno (posiblemente) tiene le ojo puesto sobre los depósitos en dólares?
Cuando se tiene en cuenta el historial de confiscaciones de Argentina y los actos del propio gobierno, el miedo a un corralito en los depósitos es racional más allá de lo que digan los balances de los bancos.
Es difícil para el gobierno disipar los miedos del público sin eliminar el cepo y aceptar una devaluación del tipo de cambio. El problema es la total falta de credibilidad del actual gobierno. Un gobierno que genera la impresión de contradecirse cada 24hs difícilmente pueda producir un shock de confianza en el público. Y ya sabemos que no le podemos creer al ministro cuando nos pide que confiemos en él, que el cepo no se va a incrementar.
¿Cómo creerle a un gobierno que ha falsificado datos tan obvios como los de inflación en su reciente gestión pasada? Los temores del público son la natural reacción del público a las confusas señales económicas del gobierno.
Las opiniones expresadas son personales y no necesariamente representan la opinión de la UCEMA.
* Associate Professor, Metropolitan State University of Denver. Visiting Professor, Universidad del CEMA. Senior Fellow, American Institute for Economic Research