La intensa sequía que afecta a varias provincias amenaza con extenderse varios meses, ya que según las estimaciones de especialistas, el próximo otoño "será el más seco" de los últimos 100 años, y ocasionará grandes pérdidas agropecuarias.
La sequía afecta a las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos, La Pampa y Córdoba, y en algunos caos ya se convirtió en la "peor" de las últimas décadas.
La técnica e investigadora en medio ambiente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), Stella Carballo, advirtió que "vamos a atravesar el otoño más seco de los últimos 100 años", y consideró que la situación se agravará porque el ciclo se iniciará "sin carga" de agua en el suelo.
En declaraciones a Radio Provincia, en la ciudad de La Plata, Carballo trazó un panorama pesimista dado que "no hay tendencia a que se modifique la falta de lluvia". La técnica señaló que en el 2008 "las lluvias han sido muy dispares y el rendimiento agrícola va a mermar bastante".
Al respecto, precisó que el año pasado "se pasó de producir 16 millones toneladas de trigo a 9 millones, con pérdidas muy grandes en Santa Fe, Córdoba, La Pampa, Sudeste de Buenos Aires. El girasol también registró pérdidas muy importantes en Chaco, Norte de Santa Fe y La Pampa y en el maíz pérdidas totales en Entre Ríos". En cuanto a la soja, sostuvo que "falta sembrar el 20 por ciento de la superficie, que no se ha podido hacer porque no llueve".
Carballo explicó que "lo que hay es una sequía de tipo agronómica y meteorológica que determina el nivel de cosecha" y dijo que "trajo aparejado otros problemas, como ataques de plagas que hace años no se daba".
Santa Fe, un ejemplo de la crisis. En la provincia de Santa Fe, los efectos climáticos causaron grandes pérdidas durante el 2008: desaparecieron alrededor de 300 mil cabezas de ganado, lo que se traduce en una pérdida de 63 millones de dólares para la producción local.
Según consignó la Agencia Fe, Carlos Sartor, secretario de Sistemas Agroalimentarios de la provincia, expresó que "se perdieron entre 250 y 300 mil cabezas de ganado en la provincia por la sequía". El número, agregó, surge de los pedidos de certificado de emergencia en Santa Fe.