Hace más de dos años empezamos un profundo proceso de transformación que implicó cambios culturales, nuevos equipos y nuevos horizontes en la compañía. Como parte de este proceso, nos dimos cuenta de la importancia de democratizar el conocimiento y la información financiera, para generar un ecosistema cada vez más integrado y transparente. Así surgió el Índice Interbanking, con la idea de hacer un informe que dé cuenta del comportamiento de las más de 500 mil empresas que tienen cuentas bancarias en el sistema financiero argentino, y que operan en los 58 bancos que forman parte de nuestra red.
Tanto para las pymes como para las grandes empresas, el índice brinda información sobre la administración financiera de las organizaciones.
Por ejemplo, si bien el 17% de las transacciones operadas a través de Interbanking en el último semestre de 2022 corresponde a pago de sueldos, el monto de la categoría representa sólo el 3,8% del total. Por su parte, el volumen de transferencias destinadas a pagos efectuados a la AFIP es del 6%, pero las mismas suman más del 21% del monto total. Saber cómo están compuestas las economías de las empresas es clave para la propia gestión que emprendedores o tesoreros de grandes empresas tienen que llevar adelante.
Otra mirada sobre la bancarización
El índice también nos mostró una forma de analizar la evolución de la bancarización, que cada vez es mayor si tenemos en cuenta que en la actualidad, el promedio es de 7,8 cuentas por empresa u organización, lo que representa un 1,5% más que hace cuatro años.
Sólo durante el segundo semestre de 2022, se incorporaron al sistema bancario 23.774 nuevos CUITs jurídicos -nuevas empresas en el sistema bancario-, lo que representa un 4,8% más que en el segundo semestre de 2021. En total, en todo el año abrieron cuentas bancarias más de 44 mil empresas y, comparando las altas y las bajas, descubrimos que el 2022 fue el año de mayor crecimiento de empresas bancarizadas en los últimos cinco años.
Argentina tiene el menor nivel de bancarización y préstamos de la región
Sin dudas, la tendencia es a que los números sigan creciendo: mientras las empresas encuentran herramientas para gestionar varias cuentas desde una misma plataforma, como por ejemplo la aplicación móvil de Interbanking -sería como un home banking de home bankings-, los bancos también están en un proceso de apertura y flexibilidad. La accesibilidad para abrir cuentas, tanto de grandes empresas como de pymes y micropymes, y para recibir distintas propuestas de financiación, va acompañada de nuevas herramientas que simplifican los viejos y tediosos procesos de aprobación de operaciones, pagos de sueldos o de impuestos.
En este contexto, los equipos de finanzas, administración y tesorería no pueden sino adaptarse a la transformación digital y eficientizar sus operaciones, que repercuten en toda la cadena de valor de una compañía u entidad.
Sólo en el segundo semestre de 2022 las empresas operaron por un monto mayor a los 107 billones de pesos en lo que respecta a transferencias electrónicas -fueron más de 67 millones de transferencias en ese período-, y si lo vemos desde una mirada integrada, contemplando el monto total de dinero que se mueve por transferencias electrónicas en todo el país, las operaciones empresa a empresa -es decir, aquellas que pasan por Interbanking-, representan el 79% del monto total, según los datos del último informe de Pagos Minoristas del Banco Central (BCRA).
Le siguen las transferencias inmediatas, que son las que provienen de la banca móvil -billeteras digitales- y de la banca internet -plataformas de home banking-.
Decir que la digitalización está llegando es quedarse corto. La digitalización de las finanzas ya es un hecho y una necesidad para todas las organizaciones financieras y no financieras, y quienes nos dedicamos a crear esos ecosistemas tenemos que trabajar en conjunto para lograr la mayor integración y transparencia posible, simplificando procesos sin perder de vista la seguridad y la confianza.
* CEO de Interbanking