La aerolínea colombiana low cost Viva Air suspendió sus operaciones el pasado lunes por problemas financieros, de acuerdo a un comunicado de la compañía, y dejó a cientos de pasajeros varados entre los que se encontraban varios argentinos.
Posteriormente, tras la intervención del Gobierno colombiano, se empezaron a reubicar a los pasajeros afectados en aviones de otras aerolíneas como Avianca. Otra medida que se adoptó por parte de otras compañías aéreas fue aumentar la cantidad de rutas.
“Viva se ve obligada a anunciar, lamentablemente, la suspensión de sus operaciones con efecto inmediato”, consigna un mensaje publicado en el sitio web de la aerolínea, donde ya no están disponibles los pasajes a sus destinos en Colombia, Argentina, Brasil y Perú.
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Según la aerolínea de bajo costo se tomó esta decisión debido a los retrasos de la Aeronáutica Civil de Colombia para aprobar la integración con Avianca, mientras que otras compañías como Jet Smart y Latam, mostraban su interés para comprarla.
En noviembre del año pasado, el regulador aéreo de Colombia rechazó la integración entre ambas aerolíneas debido a que el grupo económico alcanzaría el 100% de la participación en 16 rutas aéreas de ese país, lo que representaría un problema para la libre competencia, según las autoridades.
Explicó la low cost que durante el cese de operaciones continuará con las negociaciones con los acreedores bajo los procedimientos del Decreto 560, que apela a la recuperación empresarial.
Asimismo aseguro que trabajará para preservar su capacidad de reiniciar las operaciones en un futuro, suponiendo que la Aeronáutica Civil apruebe de inmediato la alianza que está pendiente.
Según la prensa colombiana, Viva Air no ha solicitado autorización para ejecutar despidos masivos ante el Ministerio de Trabajo colombiano porque ya ofreció un plan de retiro voluntario a 400 colaboradores. Se estima que para la firma trabajan unas 1.200 personas.
SE / LR
