La Universidad de Buenos Aires (UBA) apoyará el proceso de renegociación de la
deuda pública que lleva adelante el gobierno argentino y llamará a que la comunidad
internacional actúe de manera constructiva en el proceso de renegociación en curso, tal
como establece una resolución firmada por el rector Alberto Barbieri en el día de hoy.
En este sentido, la UBA pone a disposición todo su aparato académico y sus
instrumentos para tratar de disminuir, desde su lugar y con dichas herramientas, las
consecuencias desfavorables a mediano y largo plazo producto de la pandemia en
curso.
“Más allá de contexto de profundo desconcierto y dificultades, esta casa siempre se
brindará para tratar de tener un mejor país, con una mejor economía, mejores
posibilidades, y más justo para todos. Entre los pilares de la Universidad siempre
estarán la inclusión y la responsabilidad ciudadana, que día a día transmitimos no sólo
desde la enseñanza académica sino también desde la experiencia compartida tanto entre
alumnos, con docentes y con el resto de los que formamos parte de esta gran familia que
es la UBA”, expresó el rector Alberto Barbieri.
Entre los fundamentos, se describe que el escenario actual es el de una crisis económica
global sin precedentes desde los años ’30, producto de los impactos del COVID-19, y
que ha generado ya una dramática caída del nivel de actividad económica, destrucción
de empleos y pérdidas de ingresos para una gran cantidad de ciudadanos en todo el
mundo. La pandemia introduce una presión adicional sobre las finanzas públicas de
todos los países.
En el documento, entre sus considerandos, también se contempla que Argentina carece
de la capacidad de atender sus obligaciones en los plazos y montos previstos sin realizar
un ajuste fiscal que afectaría fuertemente no solo las condiciones de vida de buena parte
de la sociedad, sino incluso las propias posibilidades de crecimiento del país a largo
plazo. En tal sentido, es fundamental que el país retome un sendero de crecimiento
sustentable, que permita atender las obligaciones del país con sus acreedores, sin
sacrificar los objetivos de generación de empleo y mejora del bienestar de sus
habitantes.
“Para ello y como siempre, la Universidad de Buenos Aires acerca sus funciones para
ser consultadas o empleadas como sea necesario, en un trabajo conjunto en vistas
contribuir en una propuesta de restructuración razonable por parte del gobierno, para
evitar un escenario de default, pero que a la vez resulte sostenible en el tiempo y no
afecte la capacidad del país para atender las consecuencias de la pandemia, recuperar
capacidad de crecimiento y promover una reducción progresiva en los actuales niveles
de pobreza”, expresaron desde la universidad a través de un comunicado.
En línea con esto, cabe destacar que en la base del Estatuto Universitario se expresa que
la Universidad de Buenos Aires es una entidad de derecho público que tiene como fines
la promoción, la difusión y la preservación de la cultura. Cumple ese propósito en
contacto directo permanente con el pensamiento universal y presta particular atención a
los problemas argentinos.