Para la periodista Pamela Vertiz, conductora del programa Día D, "Las tropelías durante el gobierno de Alberto Fujimori que se cometieron fueron sistemáticas, gracias al silencio complaciente y cómplice de un grueso sector de la prensa que fue, literalmente comprado, como quedó registrado en los llamados 'vladivideos'." Sostiene que "La señora Keiko Fujimori siempre defendió y reivindicó el gobierno de su padre, reclamando que el juicio que lo llevó a prisión por los delitos de lesa humanidad y corrupción, fue viciado. Reclamó públicamente y durante años que su padre es inocente y que sólo cometió 'errores' pero no delitos. Varios años y una derrota electoral después, dio un giro, tomó distancia de algunos de las figuras más visibles y fuertes del llamado 'fujimorismo duro' y reconoció finalmente que se cometieron excesos y delitos. Muchos nos preguntamos si este reciente mea culpa no es sino parte de una estrategia de campaña para convencer a ese cerca del 10% del electorado aún indeciso, que ella no repetirá las prácticas autoritarias, corruptas y delincuenciales de su padre."
Academia. Para Diethell Columbus, director ejecutivo del Instituto Peruano de Estudios Gubernamentales y Sociales, "se podría decir que Kuczynski representa a la derecha liberal y Fujimori a la derecha populista, sin embargo, si analizamos sus propuestas podemos afirmar que desde el punto de vista programático no hay mayores diferencias, empero, si lo vemos desde el punto de vista de sus antecedentes políticos, quizá la candidata de Fuerza Popular es quien lleva la 'mochila' más pesada".
Considera que el nuevo gobierno tiene muchísimos temas que solucionar, pero creo que debe darle prioridad a temas como el de inseguridad ciudadana, estabilidad económica y reformas públicas. Si no atiende estas prioridades y da una pronta solución a ello, se generará una crisis que difícilmente pueda afrontar y que dejará secuelas para los siguientes gobiernos. Quien gane deberá tener mano firme para afrontar estas situaciones.
Para el especialista, "ciertamente, es innegable que el fracaso de los modelos socialistas o de izquierda en la región han impulsado que la derecha se reposicione a la cabeza de los administraciones gubernamentales y en el caso del Perú ello ha sido mucho más evidente pues el electorado decidió que en esta segunda vuelta los que compitan sean dos opciones de derecha.
Fue un proceso electoral muy extraño, con una izquierda bastante radical y fuerte, pero con dos candidatos de derecha que llegan a una segunda vuelta. Los resultados demuestran que la derecha no se ha fortalecido, sino que ha dado un paso hacia atrás".
