Durante los más de siete meses de aislamiento social las familias debieron adaptarse, incorporando nuevos hábitos. La educación 100% a distancia, el home office y el entretenimiento en el hogar ya son actividades incorporadas a la rutina. El mayor tiempo para el ocio y el encuentro familiar también significó grandes desafíos, buscando nuevas actividades y repensando otras para potenciar a las “Familias Caseras”.
Este nuevo tiempo también es una invitación a reestructurar actividades cotidianas para incorporar a la familia en los quehaceres domésticos. Cocinar junto a la familia es una de las grandes opciones. No sólo por lo divertido, sino también por los grandes beneficios que tiene para el vínculo hogareño.
►Conocimiento
Que los niños participen en las actividades culinarias también es útil para que conozcan todos los usos que pueden tener los electrodomésticos que forman parte de la cocina. Desde las amplias posibilidades que brinda una licuadora, hasta las virtudes de una vaporera, o los diferentes usos de un horno eléctrico. Algunos de los productos esenciales para elaborar recetas caseras se pueden encontrar en la Tienda online de Yelmo. Allí hay electrodomésticos de la más alta calidad ideales para usar en familia.
►Incentivo para los niños
Lograr que los niños accedan a probar nuevos sabores de vegetales o legumbres es difícil. En caso de no estar acostumbrados a este tipo de alimentos o no conocer determinadas verduras el rechazo puede ser lo más común. El incorporar a los chicos a la cocina puede ser una buena estrategia para dar vuelta esto. Al visualizar y formar parte de la preparación de la comida se genera en ellos el interés en querer disfrutar del resultado final. Así, la elaboración conjunta de platos, además de ser un buen momento, es un atributo para reforzar la buena alimentación.
►Revalorizar lo casero
Lo más común suele ser ponderar mayormente la comida comprada fuera de la casa. Pero al cocinar en familia los platos mas valiosos son los que se han elaborado en conjunto, aquellos a los que se destinó tiempo y emociones en conjunto.
►Equipo
Los adultos se ocupan de utilizar los electrodomésticos y los niños de medir la cantidad de líquido necesario para la preparación de la receta, o bien de contar la cantidad de verduras o frutas necesarias para la preparación. La cocina también es un lugar ideal para practicar el trabajo en equipo y aprender el valor de la unidad para lograr objetivos. Así un plato rico, se convierte en una meta a alcanzar mediante el esfuerzo de todo el hogar.
►Momento en familia
Incorporar a las actividades semanales una hora en la que la familia se vuelque a la cocina es una gran oportunidad para reforzar los vínculos y conocer nuevos sabores. La cocina entre todos ayuda a estrechar lazos, mientras surgen charlas y se comparten experiencias. En tiempos en los que hay más “Familias Caseras”, armar platos entre todos es una excelente opción con numerosos beneficios. ¡A cocinar!.
