ESPECTACULOS
ELLEN PAGE

"El mundo es mucho más que lo que muestra Hollywood"

Ellen Page es Vanya en The Umbrella Academy, la serie de superhéroes alternativos al modelo tradicional. Documentalista y activista, Page habla sobre su recorrido, sobre ser queer en Hollywood y los relatos que cree se vienen.

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Exito. La serie de superhéroes distintos es uno de los sucesos de la temporada de series. Allí Page es Vanya. | cedoc

Ellen Page es una actriz que ha alterado el panorama, bueno, estático de Hollywood. Famosa por sus roles en films como La joven vida de Juno o El origen, fue un rostro clave de Hollywood, pero hoy su importancia es otra. Es Vanya en The Umbrella Academy, la serie de Netflix basada en los cómics de Gerard Way y Gabriel Bá, una que toma el legado absurdo del Grant Morrison de los años 80 y 90 y los traduce a un contexto más diverso, más obsesionado con la familia disfuncional y, claro, otro fin del mundo. Pero su importancia radica en su revelación: Page admitió ser gay y desde ese instante, comenzó una carrera como directora de documentales y activista. Se convirtió en una voz importante, poderosa y sincera, y sus relatos, sea su documental Hay algo en el agua o un relato de superhéroes, sólo dan cuenta de la vitalidad de la canadiense como artista.  

—”The Umbrella Academy” ha logrado convertirse no solo en un objeto de culto, sino una serie de superhéroes que toca temas como la segregación, la diversidad sexual y la responsabilidad a la hora del poder como ninguna otra. ¿Cómo crees que han logrado esos objetivos en un mundo donde los superhéroes tienden a lo infantil?

—El hecho de que todo suceda en los años 60, una época que uno podía considerar tenía un vínculo especial a la hora de temas políticos con nuestro presente. Ahora mismo, en nuestra Estados Unidos, con Black Lives Matter, con todos entendiendo al otro, el racismo sistémico y la violencia institucional. Y también hay que considerar la idea de poder: ¿qué hacés con el poder cuando lo tenés? Salvar al mundo es una expresión enorme. Pero una sentada en un bar donde no dejaban sentar a negros es una forma real, y que vemos ahí, de salvar al mundo, salvar al mundo de sí mismo. Por ende, lo súper, aquí, va por dos lados: el absurdo de estos personajes, claro, pero un período que habla como pocos sobre todos nuestros problemas hoy.

—Considerando ese vínculo, entre esos años 60 donde se desarrolla la historia, y la actualidad de Estados Unidos, mezclado con la popularidad de los superhéroes ¿qué dice el género entonces sobre esos momentos?

—No tengo una certeza sobre el género, y qué ha explorado. Pero creo que cuando funciona habla sobre una familia disfuncional. Las familia disfuncionales agregan una capa al género. Es una historia con la idea de aceptarse, de superar al padre; y eso, como te decía, si esta bien planteado, habla perfectamente con la Estados Unidos de los años 60, que debía de alguna forma aceptarse, aceptar sus maldiciones, aquellas que nunca pudo elegir si tenía o no (o que al menos se vivían así) y rebelarse. Todos necesitan rebelarse. Y mezclar eso en el género más visto del momento lo carga de una simpatía estridente, pero que al mismo tiempo lo hace universal. The Umbrella Academy habla de muchas injusticias, personal y sistémicas.

 —¿Qué historias crees entonces que necesitamos se cuenten en un futuro cercano?

—Simple: tenemos que darle la voz a quienes no han tenido una oportunidad antes. Con suerte, Hollywood va a seguir virando en esa dirección. Ser más inclusivo, más atento, comprender sobre qué ha hablado y qué no, entender que algunas cosas han excluido incluso sin buscarlo. Nuestras historias deberían mostrar el mundo que deberíamos ser, incluso el que somos, con sus errores. Pero todos deberíamos contar, en diferentes espectros, en diferentes canales, no solo en Hollywood. El mundo es más que Hollywood. Las historias son más que las que vemos en streaming. Es también nuestra responsabilidad escucharlos. No podemos siempre pensar en los que crean.

—Has usado tu nombre y tu talento para explorar shows que van desde un documental sobre ser gay en diferentes lugares del mundo, “Gaycation”, a “Hay algo en el agua”, tu documental que denuncia la contaminación que genera un basurero al aire libre en Nueva Escocia. ¿Qué te gustaría entonces a vos contar ahora?

—Sí, me interesa esta última veta, seguir explorando contenidos que tengan que ver con la denuncia social, buscando lugares y situaciones que necesiten ser expuestas para lograr ser resueltas o comprendidas. El medio ambiente, las luchas de género, entiendo que ahí hay algo que me llama, que interesa como relato, como forma de conectar con los demás. No me veo alterando esa naturaleza en lo que hago como directora de documentales.

—Otro factor del show es la diversidad, que da la posibilidad a actores LGBTIQ+ de interpretar aquello que define su identidad. Considerando tu experiencia, cuando revelaste tu identidad sexual a Hollywood, ¿qué pensas al respecto?

—Es lo que tiene que suceder. Lo que debía suceder hacer rato. Aprender de otras experiencias, no reescribirlas, entender que la representación tiene más formas que un personaje en un show, entender que algo o alguien puede ser más complejo que determinada visión del mundo. Eso son las historias. Ver la realidad desde la ficción es escuchar la historia de otros, es entender a otros, y eso aplica a lo bueno y lo malo: entender su odio, su incomprensión, su torpeza, su violencia o su luz, su mundo, otras experiencias de vida. En ese sentido, me da mucho orgullo ser parte de este show.

—Dijiste que no estabas familiarizadas con los superhéroes, pero aun así te pregunto ¿por qué crees que han devenido algo tan poderoso en las historia de Estados Unidos y hoy han asumido esa forma casi líder en el entretenimiento masivo?

—Siento que tiene que ver con que, ahora, se ha abierto el abanico, y entendemos que, como Umbrella, estos íconos permiten contener determinadas ideas, o hasta explorar ideas. O incluso ir en contra de las ideas que creemos que representan. Su potencia como relatos los hace posiblemente vulnerables al presente, aunque también los hace vendibles. Creo son un entidad que dice mucho de Estados Unidos, pero también que pueden contener mucho del futuro de Estados Unidos.

—Todo el mundo es una locura hoy. ¿Cómo vivís el presente de Estados Unidos?

—Es difícil incluso encontrar las palabras. Lo que viene dándose  hasta ahora y lo que esta sucediendo. Una tragedia. Muchas tragedias. Que ignorar una pandemia o la violencia racial sea un mandato ejecutivo, es tan preocupante, es tan violento, que te lastima. Te lastima porque necesitas entender, y todo va por otro carril. Pareciera que no hay entonces entendimiento posible. Pero la gente esta ahí, en la calle, protestando, y por otro lado, tenemos negaciones, ganas de que todo siga igual. Es un momento trágico como pocos en Estados Unidos.

 

LA CULTURA COMO COMPRENSION

“Hoy tengo la suerte de poder hacer un personaje queer pero no siempre fue así”, dice Ellen Page, que interpreta a Vanya. En la serie basada en los cómics de Gerard Way y Gabriel Bá, la actriz tiene su propia historia de amor queer. Page: “Cuando admití mi sexualidad, demostré que se pueden hacer cosas más allá de los estereotipos, ayudé a que otros tuvieran el coraje de salir de donde quiera que estaban y se sentían encerrados.”  Y agrega a la hora de reflexionar sobre la cultura actual: “Todos tenemos mucho que aprender, y todavía nos queda mucho recorrido. Es complicado usar tu voz para generar determinadas ideas y es complicado juzgar determinadas ideas, simplemente porque sentís te interpelan. Entiendo ambos lados de esa ecuación, y lo complicado, creo, tiene que ver con el privilegio: las voces que tienen el privilegio de ser escuchadas versus aquellas que no. Todo entonces tiene que ver con que nos eduquemos, y no con reacciones rápidas. Eso no quiere decir que no necesitemos rapidez, pero creer que ahí está la respuesta, sin errores, sin cancelaciones, es un grave error. Hay que entender la experiencia de los otros, respetarla, y entonces comprender, y desde ahí, tomar la postura que uno desee.”