INTERNACIONAL

Inesperada muerte masiva de delfines

Científicos investigan la "mortalidad inusual" de 124 cetáceos.

Científicos trabajan sobre las decenas de delfines muertos para encontrar la causa de las muertes.
| AP

Más de 124 delfines quedaron varados en la costa atlántica de Estados Unidos desde julio, un "evento de mortalidad inusual" que motivó una investigación en curso, anunciaron autoridades federales este viernes.

Los científicos buscan determinar si el deceso de estos delfines mulares, o "nariz de botella", se debe a un patógeno infeccioso, ya que algunos parecían tener lesiones en los pulmones.

Un "evento de mortalidad inusual" ha sido declarado por la "mortandad inesperada y significativa" que se ha extendido a las costas de Nueva York, Nueva Jersey, Delaware, Maryland y Virginia desde principios de julio, indicó la Unidad de Pesca de la Administración Nacional Oceánica (NOAA).

En julio, 89 delfines quedaron varados en las playas de esos estados del este del país y otros 35 han sido encontrados muertos en lo que va de agosto. "Varios delfines han presentado lesiones pulmonares", dijo la NOAA en un comunicado.

"Las pruebas preliminares de los tejidos de un delfín indican una posible infección de morbillivirus, aunque es demasiado pronto para decir si el morbillivirus podría ser la causa". Sin embargo, para los científicos de la NOAA, la existencia de "un patógeno contagioso sigue siendo la primera causa posible".

El morbillivirus es un género de la familia de virus Paramyxoviridae. Muchos miembros de este género causan enfermedades muy infecciosas, como el morbillivirus cetáceo, la peste bovina, el moquillo y sarampión. La mayoría de los delfines ya estaban muertos cuando fueron encontrados, dijeron los científicos. Muy pocos fueron atrapados con vida, pero murieron poco después.

Por lo general un promedio de siete delfines llegan a las cosas de Virginia en julio, por lo que los 45 animales varados el mes pasado suponen un aumento significativo.

Los científicos "no quieren especular, pero los investigadores (...) no creen que esto sea resultado de la interacción humana, sino una especie de evento biológico", dijo Candler. Si se trata de una enfermedad, poco se pueden hacer, agregó. "Tiene que seguir su curso", dijo Candler. "No se puede vacunar a una población salvaje, por desgracia".