Amazon patentó un sistema electrónico que le permite, gracias a un brazalete, detectar los movimientos de las manos de sus empleados en los almacenes para supervisar su trabajo, una idea que provocó, por lo pronto, indignación en Italia. Este sistema de "rastreo" de los movimientos de las manos de un empleado "puede usarse para supervisar la realización de las tareas asignadas", como el inventario y la preparación de los pedidos, explican los documentos oficiales relacionados con esta patente, disponibles en internet y revelados por el sitio especializado Geekwire.
El dispositivo está "pensado para ser usado (...) cerca de la mano y para emitir vibraciones" para guiar al empleado, continúa el documento. "Las especulaciones sobre esta patente son incorrectas", dijo a la AFP un portavoz de Amazon. "Todos los días, en cualquier empresa del mundo, los empleados usan escáneres manuales para hacer el inventario y preparar los pedidos", agregó.
"Colocar este dispositivo en la muñeca de los empleados les permitiría tener las manos libres y no tener los ojos clavados en las pantallas", argumenta Amazon, y agrega que si la idea llega a ser implementada, mejoraría la organización para los trabajadores que se encargan de la preparación de pedidos. La idea ya ha provocado fuertes reacciones en Italia, como la del jefe del gobierno, Paolo Gentiloni, quien dijo que "el desafío es el trabajo de calidad y no trabajar con un brazalete". "¿Hombre o esclavo? Quiero devolver la dignidad al trabajo, algunas multinacionales explotan, presionan y luego descartan. ¡Ya basta!", reaccionó por su parte el líder del partido Liga Norte, Matteo Salvini.
El gigante del comercio por internet tiene desde hace largo tiempo la reputación de otorgar condiciones de trabajo difíciles en sus almacenes y centros de distribución para aumentar la productividad de los empleados y garantizar las entregas rápidas a los clientes.
En 2015, el diario The New York Times habló de una cultura corporativa "nociva" en Amazon, destinada a aumentar la productividad de los trabajadores, una descripción que fue rechazada en aquel momento por el jefe del grupo, Jeff Bezos. Amazon divulgó esta semana sus resultados trimestrales en fuerte alza, con una ganancia neta de 1.856 millones de dólares y una facturación de 60.450 millones de dólares.