Mientras el presidente venezolano Hugo Chávez y la cúpula de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) parecen acercarse cada vez más a la posibilidad de un canje humanitario, el mandatario colombiano Álvaro Uribe sigue siendo el blanco preferido de las críticas de la guerrilla y de los familiares de los secuestrados.
Los esfuerzos para un canje de rehenes en Colombia están produciendo avances, dijo Chávez hoy en una entrevista radial, en la que también aseguró que "el tema ha tomado una dinámica interesante y hasta apasionante por primera vez en mucho tiempo".
En los últimos días, Chávez demostró que el éxito de la mediación entre el gobierno colombiano y las FARC está muy arriba en su lista de prioridades cuando suspendió su aparición en la Asamblea de la ONU para reunirse con familiares de secuestrados.
En la entrevista difundida hoy, el mandatario reiteró la importancia de un encuentro con el septuagenario fundador de las FARC, con miras a concretar el intercambio de 45 secuestrados, entre ellos la política franco-colombiana Ingrid Betancourt, por 500 guerrilleros detenidos.
" Estoy buscándolo en el mapa a ver dónde lo ubico para caerle directo en un paracaídas", bromeó, al ser interrogado sobre las gestiones para una cita con el jefe insurgente.
En respuesta a las declaraciones de Chávez, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) emitieron un comunicado en el que agradecieron el trabajo del mandatario y aprovecharon para criticar a Álvaro Uribe por su negativa a desmilitarizar dos municipios para negociar el canje.
"No se había visto la circunstancia de acompañamiento a una iniciativa de solución al conflicto colombiano que tomara en cuenta las razones populares y, dentro de ellas, el punto de vista de los alzados contra la inequidad del régimen", destacaron las FARC en referencia al trabajo de Chávez.
"Saludamos con beneplácito, gratitud y esperanza las generosas intenciones de todos los pueblos y personalidades que se han empeñado en tender puentes de reconciliación para los colombianos, pero en especial agradecemos con optimismo las invaluables gestiones emprendidas por el compañero presidente Chávez", agregó la nota.
Por su parte, desde Nueva York, Álvaro Uribe volvió a expresar su enérgico rechazo a una zona de despeje desmilitarizada exigida por la guerrilla de las FARC para un intercambio humanitario de rebeldes presos por rehenes del grupo armado.
"Para liberar secuestrados no se necesitan zonas de despeje", sostuvo Uribe en entrevista con la agencia AFP, al margen de la Asamblea General de la ONU.
"Colombia tuvo mucho tiempo territorios donde no había presencia del Estado (...), mucho tiempo territorios despejados" y eso contribuyó a que crecieran guerrillas y paramilitares, argumentó Uribe.
Fuente: AFP; DPA y El tiempo