El número de fallecidos a causa de la pandemia del coronavirus Covid-19 podría ser mucho mayor que el reportado oficialmente “debido a que el país no dispone de recursos extra para someter a prueba todos los cadáveres”, aseguró un informe.
El país europeo surgió como el epicentro europeo del virus antes de dispararse para convertirse en el país con más muertes por la infección a nivel mundial. Su número de muertos actualmente es de 13.200, una cifra gigantesca en comparación con más más de 3.300 fallecimientos registrados oficialmente en China, donde comenzó el brote en diciembre.
Un hogar de ancianos en Coccaglio, cerca de Milán, informó que 24 residentes murieron durante el mes de marzo pero a ninguno de ellos se hizo la prueba del coronavirus, según publicó el diario estadounidense Wall Street Journal, afirmando que la misma situación ocurrió en otro centro de atención en una ciudad cercana llamada Lodi.
La publicación, que analizó las muertes en Lombardía, una de las áreas más afectadas por la enfermedad, revela que ciudadanos que mueren por Covid-19 no llegan al hospital para hacerse la prueba. Esto significa que es probable que el costo humano del coronavirus sea mucho más devastador de lo que se pensaba originalmente.
Las personas mayores en áreas rurales y lugares de difícil acceso, y aquellas que no pueden acceder al tratamiento debido a la crisis sanitaria, corren especial particular de convertirse en víctimas silenciosas del virus. “Hay muchos más muertos de los que se declaran oficialmente… Las personas murieron y nunca fueron examinadas porque el tiempo y los recursos son limitados”, reconoció Eugenio Fossati, unj funcionario de la alcaldía de Coccaglio.
Crematorios desbordados
El enfoque de Italia para contar a los infectados es similar al de muchos países en todo el mundo, testeando únicamente a los ciudadanos que muestran síntomas del virus. Según funcionarios locales, médicos y personal de los servicios funerarios en alrededor de dos de los principales puntos críticos de virus en el país, Bérgamo y Brescia, el número de muertos es al menos el doble del registrado desde febrero.
El principal crematorio de Milán tuvo que cerrar durante un mes para poder gestionar "un aumento constante y progresivo de los cuerpos que esperaban ser incinerados", dijo el ayuntamiento. "Nuestros servicios de pompas fúnebres y nuestros empleados en los cementerios trabajan sin descanso, con un gran sentido de su responsabilidad", indicaron los responsables de los servicios públicos. En Bérgamo, la ciudad más afectada del país, los cadáveres fueron transportados por camiones militares a otras regiones para su cremación.
Desde que empezó la epidemia, más de la mitad de fallecidos en Italia (7.960 de un total de 13.915) fueron registrados la región de Lombardía, pulmón económico del país. El 28 de marzo, el número de nuevos casos de coronavirus en Italia fue el más bajo en casi quince días, lo que sugiere que las medidas de distanciamiento social del país están funcionando. Sin embargo, expertos en epidemiología creen que, en realidad, Italia tiene hasta seis millones de infectados.
DS