El juez Michael Pastor ratificó este martes que Conrrad Murray deberá cumplir una pena de cuatro años de prisión en una cárcel del condado de Los Ángeles por administrarle a la estrella del pop el propofol que éste usaba para dormir y que deterioró su salud hasta llevarlo a la muerte.
Pastor aseguró que Murray podría haberse negado a proporcionarle esa droga, como lo habían hecho otros doctores. Murray "abandonó a un paciente que confió en él, le administró fármacos potencialmente peligrosos y no mostró ningún sentimiento de arrepentimiento, lo cual significa que sigue siendo un peligro", dijo el juez.
Tras escuchar los alegatos de ambas partes, Pastor se refirió a Murray como un "mentiroso patológico" y consideró que representa un "peligro para la sociedad", razón por la cual decidió no otorgarle la libertad condicional.
Dijo que las acciones del doctor violaron la relación médico-paciente e insistió en que el cardiólogo no cometió un error aislado sino que se involucró en un comportamiento que representa "una deshonra para la profesión médica".
Murray, quien puede apelar la sentencia, ya cumplió 23 días en prisión, que sumado a su buen comportamiento le acreditan a 46 días servidos.