El calculo proviene de la UNESCO, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, en el Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra los Periodistas. Mañana y por dos días en Viena, los Estados que adhieren a la UNESCO, van a discutir sobre iniciativas que hagan frente a la impunidad, según esa "tasa escandalosamente alta".
Se anticipa que el informe a debatir indica un descenso de los crímenes contra periodistas de solo el 9% en los últimos 10 años, una baja “insuficiente para conseguir frenar el espiral de la violencia”. En el periodo 2020-21, fueron asesinados 117 periodistas, a 91 de los cuales (el 78%), los abatieron “fuera de su horario de trabajo, en su casa, vehículos o en la calle, pero no en una misión específica. A varios los mataron delante de sus familiares, incluidos sus hijos”, resume la UNESCO.
La totalidad de los 193 Estados que constituyen la ONU, también integran la UNESCO, la cual postula contribuir a “la elaboración y aplicación de leyes y políticas nacionales sobre medios de comunicación”, además de “formar a jueces, fiscales y fuerzas de seguridad para que hagan valer los derechos de los periodistas y garanticen la investigación y el enjuiciamiento de las agresiones cometidas en su contra”.
Dos corresponsales de guerra que embellecen el periodismo
La UNESCO confirma que en los últimos diez años, "ha formado a más de 24.000 jueces y agentes judiciales, 15.000 de ellos en América Latina, en el marco de una fructífera colaboración con la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)". Asimismo "ha formado a más de 11.500 policías, entre otras cosas mediante un nuevo curso en línea lanzado este año en colaboración con la Asociación Internacional de Policía (IPA)".
Por cierto, a comienzos del presente año 2022, Presse Emblème Campagne (PEC), oenege basada en Ginebra, denunció durante enero pasado, el homicidio de 12 periodistas a causa de su actuación profesional, cuatro de los cuales fueron mexicanos, uno hondureño y otros dos de Haití, fenómeno que constituye un récord en comparación con años precedentes. "Si esta tendencia perdura en 2023, podríamos tener un periodista asesinado por semana en México", aventuró la PEC.
En 2021, la PEC identificó la caída de 79 periodistas en 29 países. Por entonces Pakistan fue el país más peligroso, con 12 víctimas, seguido de México (10 muertos), Pakistan (7), India (6), y Filipinas (4). Mientras que en 2020 fueron 92 los reporteros aniquilados, en 2022 ya llegan a 103. A causa de la invasión rusa a Ucrania, la PEC recuerda los asesinatos del periodista Brent Renaud, del New York Times, en Irpin, y cita otro casos: Maks Levin, Pierre Zakrzewsli y Frederic Leclerc-Imhoff.
Fundada en 2004, la PEC preconiza la adopción de "una Convención Internacional para mejorar la protección y la seguridad en zonas de conflicto de los trabajadores de los medios de comunicación", una iniciativa apoyada por otras 60 ONG y asociaciones de periodistas de diferentes continentes. En definitiva, la UNESCO concluye que hay urgencia de impulsar las "medidas necesarias para garantizar que los crímenes cometidos contra periodistas se investiguen adecuadamente y se identifique y condene a sus autores".
Desde Ginebra, Juan Gasparini.