El Papa Benedicto XVI dijo hoy que estaba "sumamente afligido" por la ola de indignación causada por sus palabras sobre el Islam "que no expresaban de ninguna manera (su) pensamiento personal", durante la celebración del Angelus en Castel Gandolfo.
Sin embargo el Papa, que se expresaba por primera vez públicamente sobre esta controversia, no presentó las excusas formales que reclamaba el mundo musulmán.
" Estoy profundamente afligido por las reacciones causadas por un breve aparte de mi discurso (...) considerado como ofensivo para la sensibilidad de los creyentes musulmanes cuando se trataba de una cita de un texto medieval que no expresa de ninguna manera mi pensamiento personal", declaró el Papa.
"Espero que la declaración de mi Secretario de Estado contribuirá a apaciguar los ánimos y a aclarar el verdadero sentido de mi discurso (...) que era una invitación al diálogo franco y sincero con un gran respeto recíproco", agregó Benedicto XVI.
El cardenal Tarcisio Bertone, que hoy dijo que el viaje del papa a Turquía, previsto para fines de noviembre, se mantiene al no existir "por el momento razones para anularlo", afirmó ayer que el Papa lamentaba profundamente que sus palabras "hayan sido interpretadas de una manera que no correspondía a sus intenciones".
La polémica se desató cuando en una visita a su Baviera natal, Benedicto XVI pronunció un discurso en la Universidad de Ratisbona, de la que fue catedrático, en el que condenó la "irracionalidad" de "la difusión de la fe mediante la violencia", como ocurre en la 'Yihad' (guerra santa) del Islam.
El Papa lamentó las reacciones que provocó su discurso, pero no se disculpó con los musulmanes
Fue durante la celebración del Angelus, en su primera aparición pública tras el escándalo con el pueblo musulmán. Dijo "estar afligido" por las respuestas a sus palabras. Desde el Vaticano afirmaron que “no hay razones” para anular ninguna visita del sumo pontífice.
