INTERNACIONAL
debate sobre la ultraderecha

El progresismo francés discute si marchar o no con la polémica Le Pen

¿Victima?. La líder del FN denunció que la intentan marginar.
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AFP
París
Luego del atentado a la redacción de Charlie Hebdo, el progresismo en Francia debatía ayer la exclusión o no de la ultraderecha en la masiva manifestación convocada para mañana en París para repudiar los ataques. La marcha fue convocada como expresión de la “unidad nacional” en rechazo a los actos terroristas, pero importantes figuras de la política francesa han dicho que no quieren compartir filas con la polémica líder del Frente Nacional, Marine Le Pen.
Luego de reunirse con Le Pen, el presidente François Hollande proclamó en un discurso televisado que “todos los ciudadanos pueden ir a la manifestación del domingo”.
Le Pen admitió que el mandatario le había manifestado que “su seguridad sería garantizada”, gesto que agradeció. Sin embargo, agregó: “No logré obtener del presidente de la República el levantamiento de la prohibición a nuestro movimiento, sus representantes, que millones de franceses esperaban ver en la manifestación, participando en condiciones dignas y respetuosas de nuestro movimiento. Obviamente, lo deploro”.
La marcha fue convocada por asociaciones, sindicatos y los principales partidos políticos de Francia, algunos de los cuales manifestaron su oposición a la presencia de Le Pen.
El vocero del Partido Socialista (PS), Carlos Da Silva, declaró que “el Frente Nacional es la antítesis de lo que representa Charlie Hebdo, no tendría ningún sentido que ese partido esté presente a nuestro lado en la manifestación”.
Según el ex primer ministro François Fillon, “la polémica es detestable y peligrosa” porque “va en el sentido de lo que quieren los terroristas” que amenazan al país. “Yo no quiero al Frente Nacional, pero es un partido insertado en la República y la democracia, que tiene millones de electores”, subrayó Fillon.
Por su parte, Le Pen dijo ser la única dirigente política en Francia que habla de la necesidad de una guerra “contra una ideología: el fundamentalismo islámico”. En Twitter, confirmó que no participará mañana y se justificó: “No voy a forzar los cordones policiales o de los organizadores de una manifestación donde quienes la convocan no quieren que estemos”