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El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró ayer que él y su par venezolano, Nicolás Maduro, se sienten “solos” en el nuevo escenario político latinoamericano.
De cara a la próxima cumbre del Mercosur y ante el cambio de tendencias políticas en la región, que en la Argentina cristalizó con el triunfo presidencial de Mauricio Macri, Morales apuntó en una entrevista con el diario Página/12: “Nos sentimos solos con Maduro, me duele mucho ver este panorama político regional. Pero sé que los trabajadores no solamente de Bolivia, sino también de América Latina, van a acompañar. Tampoco estamos asustados”.
El mandatario boliviano agregó que “tal vez algunos países se incorporan a la mal llamada centroderecha o centroizquierda”, aunque advirtió que, en su opinión, sólo “se es antiimperialista o imperialista”.
Sobre la situación en Brasil, donde la presidenta Dilma Rousseff se ve expuesta a un posible proceso de impeachment, Morales dijo que la mandataria afronta “un golpe parlamentario en ciernes”.
Morales parece ser una excepción al virtual cambio de ciclo político que atraviesan las tres potencias de Sudamérica: Brasil, Argentina y Venezuela. En Bolivia, su partido Movimiento al Socialismo (MAS) sigue teniendo una imagen favorable. Los analistas coinciden en que la performance económica boliviana ha sido regularmente buena en los últimos años, con crecimiento estable y un prudente manejo de las finanzas del Estado. No obstante, los sondeos afirman que la mayoría de los bolivianos votará contra la reforma para permitir la reelección de Morales.
