En su primera visita a Irak tras asumir su nuevo rol en el gabinete republicano, el flamante secretario de Defensa de los Estados Unidos, Robert Gates, reafirmó hoy en Bagdad la idea impulsada por el gobierno de su país de luchar para mejorar la seguridad en Irak.
Según declaró, hasta ahora había infravalorado lo competente que son los iraquíes en la búsqueda de nuevas opciones.
Tres días después de asumir el cargo, Gates se entrevistó por primera vez con el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, sobre la posible ayuda militar extranorteamericana, y señaló al respecto que hablaron sobre cómo los Estados Unidos podían apoyar los esfuerzos de los iraquíes para mejorar la seguridad. Durante sus conversaciones con soldados estadounidenses, Gates había aclarado ya que el objetivo de su visita era hacerse con una imagen lo más clara posible de la situación en Irak.
Gates declaró a la CNN que no asumió el cargo de secretario de Defensa para llevar a cabo cualquier juego político. Además, aseguró que sus decisiones y recomendaciones no se verán afectadas por la presión política.
Fuente: DPA