INTERNACIONAL
éxodo dramático

Israel presiona para acelerar la evacuación de civiles de Gaza

Continuaba ayer el desplazamiento de miles de familias de gazatíes hacia la parte sur de la Franja, a la espera de la anunciada invasión terrestre de las tropas isralíes como parte de la ofensiva para “aplastar” a Hamas tras los ataques terroristas del 7 de octubre, pese a la presión internacional, inclusive de aliados internacionales como Estados Unidos, para que evite una “catástrofe humanitaria” librando una guerra urbana con los milicianos palestinos.

2023_10_15_palestina_gaza_afp_g
Destrucción. Palestinos tras uno de los bombardeos israelíes, que acumula fuerzas en la frontera. | AFP

Israel volvió a urgir ayer a la población del norte de Gaza a abandonar la zona y siguió bombardeando el enclave palestino, en respuesta a la brutal incursión terrorista del movimiento islamista Hamas en su territorio hace una semana.

El primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, presionado internacionalmente para evitar una catástrofe humanitaria, no dio señales de desistir en su determinación de destruir a Hamas, pese al riesgo de provocar una matanza de civiles, que gobierna el enclave desde 2007.

“¿Están listos para lo que viene? Esto va a seguir”, proclamó el mandatario ultraconservador durante una visita a soldados desplegados frente al enclave, en el octavo día de una guerra que ya dejó miles de muertos en ambos bandos.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

El ejército israelí anunció que había eliminado a dos jefes militares de Hamas: Murad Abu Murad, “responsable de una gran parte de la ofensiva mortífera” del 7 de octubre; y un comandante de una unidad de élite “que dirigió el ataque contra las localidades israelíes cercanas a la Franja de Gaza”.

Hamas, por su lado, lanzó ayer desde Gaza una andanada de cohetes contra territorio israelí.

El ejército israelí, que el viernes también realizó incursiones terrestres en el territorio palestino, dijo ayer que se está preparando para “otras operaciones de combate importantes”.

Según el ejército, al menos 1.300 israelíes, civiles en su mayoría, murieron desde el ataque de Hamas.

En la Franja de Gaza, el número de víctimas mortales de la réplica israelí se eleva a 2.200, entre los que se cuentan 724 niños, según las autoridades locales.

El jefe de Hamas, Ismail Haniyeh, acusó a Israel de cometer “crímenes de guerra”. Según Hamas, una organización clasificada como terrorista por Estados Unidos, la Unión Europea e Israel, 26 rehenes de los cerca de 120 que capturó en su incursión del 7 de octubre murieron a causa de los bombardeos israelíes, nueve de ellos en las últimas 24 horas.

El asesor de seguridad del gobierno israelí admitió que los servicios de inteligencia cometieron “errores” que les impidieron prever el ataque islamista, el más letal sufrido por el Estado hebreo desde su creación en 1948 y desde el Holocausto.

Partir “sin demora”. Israel, que acusa a Hamas de usar a los civiles como escudos humanos, urgió el viernes a los cerca de 1,1 millones de habitantes del norte de la Franja a salir de esa zona. Miles de habitantes huyeron en remolques, burros, carretas, motocicletas o en auto, abriéndose paso entre los escombros y edificios destruidos. El jefe de Hamas, Ismail Haniyeh, instó a los palestinos a rechazar la intimación israelí.

Ayer, Israel reiteró su advertencia de que todos deben partir “sin demora”hacia el sur del enclave contra el cual decretó la semana pasada un “asedio total”, sin abastecimiento de agua, electricidad ni alimentos.

La Franja de Gaza, de 362 kilómetros cuadrados y cerca de 2,4 millones de habitantes, está situada entre Israel, Egipto y el mar Mediterráneo y sometida a un bloqueo de Israel desde 2006. La salida por Egipto, el paso de Rafah, se halla cerrada. 

El ataque de Hamas y la guerra que desencadenó avivaron el temor de que el conflicto se extienda a otros países y de que se produzca una catástrofe humanitaria en Gaza. “Incluso las guerras tienen reglas”, recordó ayer el secretario general de la ONU, António Guterres, que pidió un “acceso humanitario inmediato” a Gaza. “El sistema de salud está al borde del desastre” y “las morgues están desbordadas”, alertó.

El presidente estadounidense, Joe Biden, también denunció “la crisis humanitaria” en Gaza, al tiempo que reiteró su compromiso de entregar a Israel “lo que necesita para defenderse y responder a estos ataques”.

El presidente en funciones del gobierno español, Pedro Sánchez, subrayó ayer que el derecho internacional “no avala” la evacuación de Gaza pedida por Israel antes de lanzar una ofensiva terrestre.

Arabia Saudita, un peso pesado de Oriente Medio, anunció que suspendía las discusiones sobre una eventual normalización de sus relaciones con Israel. 

La Unión Europea (UE) anunció que triplicará hasta los 75 millones de euros (unos 79 millones de dólares) su ayuda humanitaria a Gaza. 

Tensión con Líbano y en Cisjordania. En el plano regional, dos civiles murieron ayer en un bombardeo israelí contra la aldea libanesa de Shebaa (sur), informó el alcalde de la localidad. Los últimos días se registraron varios duelos de artillería entre Israel y el Hezbolá libanés, un aliado de Hamas. El viernes, un periodista de Reuters murió y otros seis resultaron heridos en un bombardeo en esa zona, que las autoridades libanesas atribuyeron a Israel.

En Cisjordania, ocupada por Israel desde 1967, al menos 16 palestinos murieron en enfrentamientos con las fuerzas israelíes durante unas concentraciones en solidaridad con Gaza.