El líder norcoreano, Kim Jong-un, supervisó el lanzamiento de un nuevo misil balístico intercontinental (ICBM) que provocó una intensa polémica en su primera aparición junto a su hija, informó ayer la agencia estatal KCNA.
Kim declaró que responderá a las amenazas nucleares de Estados Unidos con sus propias armas nucleares al supervisar el viernes el lanzamiento del misil que, según KCNA, era un Hwasong-17, un arma que los expertos han denominado el “misil monstruo”.
El lanzamiento del nuevo misil fue un éxito, según KCNA, que destacó cómo “la prueba demostró claramente la fiabilidad del nuevo sistema de armas estratégicas”.
Kim posó en fotos junto a su esposa y su hija, en lo que constituye la primera referencia en los medios estatales a sus hijos. En las imágenes aparece junto a una niña con un abrigo blanco y zapatos rojos paseando delante del misil. Sin embargo, los medios estatales no informaron el nombre de la niña.
La cuarta generación. Lo más significativo del lanzamiento del ICBM el viernes es “la permanencia del programa armamentista del régimen de Kim, porque es integral a la sobrevivencia y continuidad” del reinado de su familia, declaró la exanalista de la CIA Soo Kim, que ahora trabaja para el centro de estudios Rand Corporation.
Sobre la cobertura de la prensa estatal, la experta dijo: “Hemos visto con nuestros propios ojos la cuarta generación de la familia Kim”.
Kim –que es nieto del fundador de Corea del Norte, Kim Il-sung, y la tercera generación que está en el poder– se casó con su mujer, Ri Sol Ju, en 2009, según la agencia de inteligencia de Corea del Sur.
Al año siguiente tuvo a su primogénito y sus hijos siguientes nacieron en 2013 y 2017, según la agencia.
La única confirmación previa de la existencia de hijos de Kim provino de la exestrella de la NBA Dennis Rodman, quien visitó Corea del Norte en 2013 y aseguró haber conocido a una bebé hija de Kim llamada Ju Ae.
Se cree que la niña que aparece en las fotos es Ju Ae, que probablemente es la segunda hija de Kim, señaló a la AFP Cheong Seong-chang, del Centro de Estudios sobre Corea del Norte en el Instituto Sejong, en Corea del Sur.
Corea del Norte disparó 17 misiles y superó su mayor bombardeo diario
Advertencias de Kim. Corea del Norte ha realizado en las últimas semanas una cifra récord de pruebas nucleares que Pyongyang afirma son una respuesta a las maniobras estadounidenses en la región.
Se teme que estos ensayos sean el preludio de una nueva prueba nuclear. KCNA dijo que Kim criticó la “agresión histérica que constituyen los simulacros de guerra” y que si Estados Unidos continúa profiriendo amenazas, Pyongyang va a “reaccionar con resolución: a las armas nucleares con armas nucleares y a la confrontación total con una confrontación total”.
Según la prensa estatal, el misil alcanzó una altura máxima de 6.040,9 km y voló una distancia de 999,2 km, parámetros que coinciden con las estimaciones de los militares surcoreanos y autoridades japonesas.
“Este lanzamiento es importante porque se cree que es el primer vuelo exitoso de un ICBM Hawsong-17”, señaló Joseph Dempsey, investigador del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS).
El misil fue lanzado hacia arriba, no hacia un costado, para evitar que sobrevolara Japón.
Pero el “misil monstruo” tiene desventajas. “Su tamaño lo hace menos práctico porque el sistema de transporte en carretera y fabricación son una carga mayor para los recursos limitados” del país, apuntó Dempsey.
Después de que Kim Jong-un declarara en septiembre que el programa nuclear de su país es “irreversible”, Estados Unidos reforzó la cooperación militar con Japón y Corea del Sur y ha buscado fortalecer la defensa en la región.
Ayer, Estados Unidos desplegó su bombardero B-1B en la península coreana para un ejercicio aéreo conjunto con Corea del Sur. El Consejo de Seguridad de la ONU anunció el sábado que discutirá el tema de Corea del Norte en una reunión el lunes.
