Agencias
Londres
El ministro de Relaciones Exteriores británico, Philip Hammond, acusó ayer al gobierno argentino de “hostigamiento” por la decisión de iniciar acciones legales a las compañías del Reino Unido que extraen gas y petróleo cerca de las islas Malvinas, medida que Daniel Filmus defendió también ayer en la capital británica.
“Es un ejemplo escandaloso de la intimidación y las amenazas contra el derecho de los habitantes de las islas Falkland (sic) para desarrollar sus recursos económicos”, afirmó el ministro.
“Argentina debe detener este tipo de comportamiento y comenzar a actuar como un miembro responsable de la comunidad internacional”, agregó Hammond.
Días atrás, el gobierno de la presidenta Cristina Fernández inició un proceso judicial contra cinco empresas, entre ellas tres firmas británicas, que perforan para extraer petróleo y gas en cercanías de las islas Malvinas, aumentando las tensiones en una disputa diplomática por la soberanía del territorio.
Ayer, Filmus, titular de la secretaría de Malvinas, defendió la demanda penal interpuesta en la justicia Argentina contra las petroleras británicas. “Argentina va a utilizar toda la fuerza del derecho nacional e internacional para evitar que los recursos argentinos sean expoliados”, afirmó Filmus en una rueda de prensa en la residencia de la embajadora en Londres, Alicia Castro.
“Queremos que la Justicia argentina castigue a las empresas que están operando sin autorización en la plataforma continental argentina”, agregó Filmus. “Algunas de ellas ya han sido sancionadas administrativamente y tienen prohibición de operar, pero con la nueva ley de hidrocarburos pudimos impulsar esta acción penal para que un juez determine el delito”, concluyó.
Este nuevo cruce diplomático se produjo una semana después de que Castro fuera convocada al Foreign Office luego de que Cristina Kirchner, en el discurso del 2 de abril, denunciara las “provocaciones” del Reino Unido tras el anuncio de hallazgos de petróleo en las Islas del Atlántico Sur.
Como represalia, el vicecanciller argentino, Eduardo Zuain, convocó al embajador británico John Freeman para que explique el silencio de su gobierno ante las revelaciones de Edward Snowden sobre espionaje electrónico “masivo dirigido contra la Argentina”, y frente a la “militarización y exploración ilegal de hidrocarburos” en las cercanías de las islas Malvinas