Manifestaciones a favor de Ucrania estallaron ayer en todo el mundo, cuando miles de personas tomaron las calles desde Londres hasta Nueva York y Teherán para denunciar el ataque de Rusia contra su vecino. La invasión de Moscú provocó una protesta mundial y sanciones punitivas de Occidente, algunas dirigidas contra el propio presidente ruso, Vladimir Putin.
En Suiza, miles de personas se reunieron en todo el país, incluidas unas mil frente a la sede europea de las Naciones Unidas en Ginebra. Los manifestantes vestidos con los colores nacionales de Ucrania, azul y amarillo, acudieron en masa a la “Silla rota”, una gran escultura que simboliza a las víctimas civiles de la guerra. Los manifestantes exigieron acciones más duras por parte del gobierno, que hasta ahora ha evitado imponer medidas estrictas, eligiendo en cambio mantenerse más cerca de su tradicional postura “neutral”. Más de 3 mil personas se reunieron en la ciudad francesa de Estrasburgo, sede de la organización de derechos humanos del Consejo de Europa, con pancartas que calificaban a Putin de asesino y pedían el fin de los combates.
Miles de personas participaron en una procesión iluminada con antorchas hacia el Coliseo, en Italia. También se reportaron manifestaciones en Israel, Estonia y Nueva York.