Cuatro rehenes de la guerrilla FARC fueron asesinados por sus captores, luego de varios años de cautiverio, en el departamento de Caquetá, sur de Colombia, luego de algunos combates con el Ejército, cuando los efectivos realizaban una operación de búsqueda.
Los cuerpos fueron encontrados con disparos esta mañana, en un hecho que el presidente Juan Manuel Santos condenó y calificó de "crimen atroz que merece la condena de todos los colombianos y de comunidad internacional", informó AFP. "Los únicos responsables de esa acción vil, de ese crimen de lesa humanidad son las FARC", enfatizó el mandatario.
El Ministerio de Defensa, Juan Carlos Pinzón, informó luego que los fallecidos son tres policías y un militar, este último el sargento del Ejército José Libio Martínez, el rehén más antiguo de las FARC, que llevaba 14 años de cautiverio. Los cuatro habían sido secuestrados entre 1997 y 1999.
"Me imagino que van a querer decir que fue la fuerza pública la responsable de esos hechos. Se requiere simplemente sentido común para ubicar toda la responsabilidad en quienes los secuestraron y hoy apretaron el gatillo", aseveró Santos.
El ministro de Defensa indicó que los cuerpos fueron hallados con disparos en la cabeza y en la espalda, luego de un combate entre la guerrilla y los militares en los que un soldado resultó herido y una guerrillera fue detenida.
Pinzón explicó que en la zona se desarrollaban operaciones militares desde hace 45 días "en búsqueda de una estructura de las FARC" y que "de acuerdo con informaciones que se tenían previamente, se decía que existía la posibilidad (de que esa columna de las FARC) tuviera a secuestrados de la fuerza pública".
Por su parte, Marleny Orjuela, quien dirige la agrupación de familiares de rehenes de las FARC Asfamipaz, criticó el operativo militar y calificó de "inhumana" la actitud del gobierno y de la guerrilla. "Los familiares están envueltos en nada. Cada día el dolor es más grande. Mataron las esperanzas de nuestras familias", dijo Orjuela, al recordar que su organización siempre se opuso "al rescate a sangre y fuego".
En junio de 2007, once concejales que eran rehenes de las FARC también fueron muertos tras un confuso incidente en el que según la guerrilla se intentó un operativo militar de rescate, mientras que las fuerzas militares dijeron que los guerrilleros se habían confundido al ver acercarse a otra columna de las FARC.
El 11 de noviembre pasado fue encontrado el cuerpo del sargento Francisco Franco, también rehén de las FARC, muerto tiempo antes.
En junio de 2010, cuatro militares y policías que estaban secuestrados por las FARC fueron rescatados en un exitoso operativo militar. En 2008, las fuerzas armadas también lograron el rescate de la política Ingrid Betancourt, tres estadounidenses y once militares y policías, en una operación incruenta.
Las FARC han liberado unilateralmente desde 2007 a 20 de sus rehenes, mientras que mantienen secuestrados a por lo menos 14 policías y militares, que plantean canjear por sus guerrilleros presos. Algunos de ellos llevan más de 10 años en cautiverio.
El pasado 4 de noviembre, el máximo dirigente de esta guerrilla, Alfonso Cano, de 63 años, fue asesinado en una operación del Ejército en el suroeste de Colombia. Para reemplazarlo, las FARC nombraron a Timoleón Jiménez, alias Timochenko, líder del ala militar de esa guerrilla.