Un argentino que residía en Brasil fue asesinado a palazos por varias personas en un bar de la playa de Preá, en el nordeste del país. Su familia reclama justicia por el hecho cuando aún no hay un solo detenido por el homicidio.
Rodrigo Manuel Duartes, apodado "Bocha", era un cordobés de 33 años que hacía dos que vivía en Brasil, donde trabajaba como empleado de la construcción. El pasado martes 3 de noviembre asistió a una fiesta en un bar ubicado en la playa de Preá en el estado de Ceará, uno de los destinos turísticos más importantes del país vecino, y se discutió con otras personas.
Tras la pelea, el dueño del local echó a todos los involucrados y ya en la calle el joven oriundo del barrio Los Olmos fue agredido a palazos en la cabeza. Luego sus agresores se fugaron.
"El martes fue a una fiesta del jefe de obra donde trabajaba. Al otro día no tuvimos novedades de él y el jueves nos avisaron que fue golpeado, nos enteramos que estaba grave. Tuvo una discusión y al parecer afuera del lugar, una persona lo esperó y le pegó un palazo en la cabeza", contó Nicolás Cabrera, un amigo de la víctima, en el programa El Show del Lagarto que se emite por el canal El Doce.
"El argentino fue agredido por individuos que lo golpearon con pedazos de madera. Llegó a ser socorrido en una sala de primeros auxilios del municipio de Cruz y luego a un hospital de alta complejidad de Sobral", indicó el parte de la Policía Civil (investigaciones) al que tuvo acceso la agencia Télam.
A raíz de la golpiza, el cordobés sufrió un traumatismo de cráneo. Fue operado gracias a la gestión del cónsul de Recife y estuvo tres días internado hasta que finalmente por la gravedad de sus heridas falleció.
El reclamo de sus familiares
La madre de Duartes emprendió rumbo a Brasil tras ser notificada de la gravedad del estado de su hijo. Sin embargo, llegó allí cuando él ya había fallecido. El joven cordobés será velado en Preá, el pueblo pesquero en el que residía. "Unos amigos de allá consiguieron una posada para hacer un velorio íntimo", indicó Cabrera.
La madre del joven decidió no repatriar su cuerpo y que los restos sean inhumados en Brasil, donde él había hallado su nuevo hogar. "A él siempre le gustó la naturaleza y el mar. Bocha era un aventurero. Viajó a buscar nuevas cosas, encontró su lugar, estuvo cómodo. Y también encontró el final", lamentó su amigo. Sus seres queridos ahora luchan a la distancia para que se encuentre a los responsables de su muerte.
Viajó a buscar nuevas cosas, encontró su lugar, estuvo cómodo. Y también encontró el final, lo recordó Nicolás Cabrera
Por el momento, no hay detenidos por la agresión. "La Policía Civil del Estado de Ceará realiza diligencias con el objetivo de identificar y detener a los involucrados en el crimen", señaló el informe policial del hecho.
Cabrera contó que tan solo pudieron contactarse con potenciales testigos de los hechos a través de las redes sociales y que buscan cámaras que hayan podido captar imágenes de quienes lo agredieron.
B.D.N./FeL