La historia oficial cuenta que Adolf Hitler se suicidó junto a su mujer Eva Braun el 30 de abril de 1945, cuando la derrota de la Alemania Nazi era casi total y el ejército ruso avanzaba sobre Berlín. Ahora surgieron nuevas pruebas que ponen en duda la veracidad de esa versión.
Desde ese día, muchos cuestionaron las condiciones de su muerte, y hay quienes sostienen que realmente no murió en esa fecha, incluyendo la teoría de que se radicó en Argentina. Pero esas versiones fueron desmentidas cuando un fragmento de su cráneo, apropiado por los rusos, fue exhibido en Moscú en 2000. Hasta ahora: Un grupo de investigadores estadounidenses descubrió que ese cráneo, conservado por décadas en manos soviéticas, no pertenecía a Hitler, sino a una mujer no-identificada de menos de 40 años de edad.
Se realizaron análisis de ADN en la Universidad de Connecticut y los resultados fueron plasmados en un documental llamado La Huída de Hitler. "El hueso era demasiado angosto; los huesos masculinos tienden a ser más robustos", explicó Nick Bellantoni, arqueólogo especialista en huesos de Connecticut, al diario británico The Guardian. "Y las suturas donde se juntan las partes del cráneo parecen corresponder a alguien de menos de 40 años", agregó el científico. En abril de 1945, Hitler acababa de cumplir 56 años.
Bellantoni viajó a Moscú y examió los restos del Fürher en el Archivo Estatal ruso, incluyendo el fragmento del cráneo y el sofá donde -supuestamente- se suicidaron Hitler y Eva Braun. Pudieron extraer muestras de ADN viables, y la Universidad de Connecticut cerró su laboratorio durante tres días para dedicarse exclusivamente a investigar el caso, según The Guardian.
La versión oficial indica que Hitler se suicidó al consumir una cápsula de cianuro y pegarse un tiro en la cabeza, mientras que Eva Braun, con quien se había casado el día anterior, sólo se envenenó con el cianuro. De acuerdo a los testigos, sus cuerpos fueron envueltos en sábanas e incendiados con petróleo en un crater cercano a su bunker de Berlin.
Pero ahora los desconcertantes resultados prueban que el ADN del cráneo es femenino. ¿Podría haber pertenecido a Eva Braun? "Sabemos que el cráneo corresponde a una mujer de entre 20 y 40 años, pero no hay reportes que indiquen que Braun se pegó un tiro ni que nadie le disparó luego", explicó Bellantoni, y concluyó: "Mucha gente murió cerca del bunker, podría ser cualquiera".