Mientras los 26 tripulantes de un atunero español continúan secuestrados por un grupo de piratas frente a las costas de Somalía, varios representantes del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero mantuvieron una reunión de crisis para intentar liberar a los rehenes.
Del encuentro participaron el ministro de Relaciones Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega y otras autoridades de Ministerios.
El gobierno decidió crear una "célula de seguimiento" dirigida por el jefe del Estado Mayor de Defensa, Félix Sanz Roldán, con el fin de tomar las decisiones que permitan liberar a los secuestrados, explicó de la Vega, que dijo esperar una "rápida y feliz solución".
El atunero español Playa de Bakio, con una tripulación de 26 miembros, 13 de ellos españoles, fue secuestrado ayer por cuatro piratas cuando pescaba frente a la costa somalí.
En conversación telefónica con la Radio Nacional de España (RNE) el capitán del barco dijo que, por el momento, todos están bien. "Soy el patrón del barco (...), estamos bien todos y no hay problema, de momento no hay problema", aseguró.
El hombre no llegó a dar su nombre, pues fue interrumpido por uno de los piratas, quien dijo a su vez, en inglés, que "no hay problemas" y que los secuestradores querían "dinero”.
Fuentes gubernamentales negaron que haya heridos, como habían informado varios medios españoles citando al director del Programa de Asistencia a Navíos del Este de África, con sede en la ciudad keniana de Mombassa.
El Ministerio español de Asuntos Exteriores confirmó que una fragata militar española que se encontraba en el mar Rojo se dirige "hacia el lugar del secuestro para intentar mantener contacto con el barco".
El secuestro tiene lugar sólo 15 días después de que un velero de lujo francés, "Le Ponant", fuera tomado por piratas somalíes y retenido durante una semana. Los marinos fueron liberados tras el pago de un rescate, y seis piratas fueron capturados luego por fuerzas francesas y trasladados a Francia, para ser juzgados.
Por otro lado, la Oficina Marítima Internacional (OMI), con sede en Kuala Lumpur, indicó que un petrolero japonés fue atacado este lunes por piratas fuertemente armados frente a la costa somalí, pero que consiguió escapar con toda su tripulación ilesa.