"Un sueño americano al revés", así definió el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, el momento que atraviesan sus compatriotas. El líder de la Casa Blanca señaló que la actual crisis económica es "una catástrofe para las familias de los trabajadores norteamericanos".
De acuerdo a una información que se difundió esta jornada, Estados Unidos experimentó su peor retroceso (-3,8%) desde el primer trimestre de 1982 (-6,4%). A pesar de que el PIB bajó menos de lo previsto, los analistas anunciaron que la marcha de la economia actual no se observaba desde el cuarto trimestre de 1991.
"La recesión se agrava y crece la emergencia provocada por la crisis económica. Ayer pasamos una nueva barrera: la mayor cifra jamás vista de estadounidenses que reciben los subsidios de desempleo. Cada día deja su rastro de despidos, trabajos perdidos y vidas desestabilizadas", afirmó Obama.
Y añadió: "Hemos perdido 2,6 millones de empleos al año pasado y 2,8 millones de personas quieren un trabajo a tiempo completo, lo necesitan pero tienen que aceptar un tiempo parcial", En ese sentido, Obama manifestó que los norteamericanos "necesitan que se actúe ahora",
De esta manera, Obama volvió a presionar al Congreso para que apruebe un gigantesco plan de reactivación económica por valor de unos U$S819.000 millones. El paquete (con media sanción de la Cámara de Representantes) no cuenta con el respaldo de los legisladores republicanos, por lo que el Partido Demócrata deberá recurrir a su propia mayoría.
Fuente: AFP
