El ahora expresidente de Perú, Pedro Castillo, llegó esposado y en helicóptero en la mañana de este jueves 8 de diciembre al penal de Barbadillo, en el distrito Ate de Lima, el mismo lugar donde el exmandatario Alberto Fujimori se encuentra cumpliendo una condena a 25 años de prisión.
Según informó el medio El Comercio, fue la Fiscalía General el organismo que ordenó la apertura de una investigación en contra de Castillo por "presuntos delitos contra los poderes del Estado y el orden constitucional" en forma de "rebelión" en perjuicio del Estado.
El expresidente también será investigado por el "presunto delito de concierto para delinquir". El Ministerio Público ya abrió un sumario en su contra por los cargos mencionados.
Crisis express en Perú: Castillo dio un autogolpe, fue destituido y juró la vicepresidenta
Castillo fue destituido por el Congreso después de que este ordenara el cierre del Parlamento, impusiera un toque de queda y ordenara la creación de un "gobierno de excepción" para gobernar por decreto. Sin embargo, el funcionario no recibió ningún tipo de apoyo, por lo que fue detenido y enviado a prisión.
Tras lo ocurrido, asumió el mando su vicepresidenta, Dina Boluarte, mientras que el ex mandatario permaneció un par de horas detenido en la Prefectura de Lima hasta que fue esposado y trasladado a un helicóptero que lo dejó en el penal de Barbadillo, que es la cárcel ubicada en la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía.
Cabe destacar que Castillo fue detenido en un operativo supervisado por la fiscal Patricia Benavides, quien calificó lo hecho por el expresidente como un "quebrantamiento del orden constitucional" y quien luego ingresó al Palacio de Gobierno junto a la Policía Nacional para retirar varias cajas de documentación.
A su vez, en el marco de las diligencias preliminares contra Castillo por los delitos de rebelión y corrupción, la Fiscalía también allanó algunos ministerios con el objetivo de recuperar toda documentación que le sea de utilidad a la investigación abierta en contra del ex funcionario.
Mientras tanto, el ex Jefe de Estado carga sobre sus hombros una orden de detención preliminar, la cual puede ser extendida por otros diez días para evitar una posible fuga, dado que al momento de ser detenido, este se dirigía a la embajada de México en busca de asilo.
La vicepresidenta Dina Boluarte asumió la presidencia de Perú
La intención de la fiscal es que el expresidente afronte todo el proceso penal en prisión. Al mismo tiempo, también continúan vigentes los otros seis casos que afronta Castillo, acusado obstruir la justicia y ser la cabeza de una organización criminal encargada del reparto de obras públicas.
Durante el tiempo que esté el prisión, el ex mandatario compartirá el penal de Barbadillo con otro "colega" que comparte su misma desgracia, Alberto Fujimori. En este sentido, al ya estar iniciado el proceso de investigación por rebelión, se torna complejo que Castillo recupere su libertad.
AS/ff
