Un informe clasificado de los servicios de inteligencia estadounidenses revela que el programa nuclear de Irán no fue destruido luego de los bombardeos de Estados Unidos e Israel contra tres de las principales instalaciones iraníes. “En el mejor de los casos, se vería retrasado unos meses”, indica el expediente.
Mientras tanto, el jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi, dijo que el objetivo del organismo es regresar a Irán para evaluar la situación en las centrales nucleares.
El informe de la inteligencia sobre el efecto de los ataques
El trabajo preliminar fue realizado por la Agencia de Inteligencia de Defensa estadounidense, el brazo de inteligencia del Pentágono, y fue filtrado a la prensa por un denunciante. Está basado en los reportes que condujo el Mando Central de los Estados Unidos luego de los bombardeos, de acuerdo con la cadena CNN.
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Según la evaluación, solo la parte superior de las centrales Fordow y Natanz habrían sido destrozadas. Los hallazgos irían en desacuerdo con las declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, quien aseguró que las instalaciones habían sido “total y completamente arrasadas”.
Los ataques lanzados durante la misión secreta “Martillo de Medianoche” del pasado sábado 21 de junio habrían sellado las entradas a las instalaciones, pero sin provocar daños a los edificios subterráneos. El operativo involucró a siete bombarderos B-2 Spirit, capaces de lanzar bombas antibúnker de 13.600 kilogramos.
Incluso, el informe estadounidense indica que las centrifugadoras principales que se utilizan principalmente para el enriquecimiento de uranio seguirían funcionando. Hasta el momento, los 400 kilos de uranio altamente enriquecido que se encontrarían en las centrales iraníes atacadas no fueron hallados. Los servicios de inteligencia de Estados Unidos evalúan la posibilidad de que hayan sido trasladados antes de los ataques.

Sobre el informe filtrado, la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, rechazó su autenticidad en un comunicado publicado en su cuenta de X (ex Twitter). “La supuesta ‘evaluación’ es totalmente errónea y estaba clasificada como ‘secreta’, pero aun así fue filtrada a la CNN por un perdedor anónimo de la comunidad de inteligencia”, escribió.
La vocera afirmó que la filtración del reporte se trata de “un claro intento de degradar al presidente Trump y desacreditar a los valientes pilotos que condujeron una misión excelentemente ejecutada para destruir el programa nuclear de Irán”. “Todos saben lo que pasa cuando arrojas catorce bombas de 15.000 kilogramos de manera perfecta en los objetivos: total destrucción”, agregó.
Por su parte, Trump desacreditó el informe del Pentágono en la red social Truth Social, durante su visita a La Haya para la cumbre de la OTAN. “Todos los que dicen que las bombas no lo destruyeron todo solo quieren socavar el éxito del presidente”, manifestó, citando a su secretario de Defensa.
Rafael Grossi afirmó que su prioridad es regresar a Irán para evaluar el impacto de los ataques
El jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi, declaró que el objetivo de la entidad es regresar a Irán para evaluar la situación en las centrales nucleares tras los ataques de Estados Unidos e Israel.
En cuanto al impacto del ataque a las centrales nucleares, Grossi dijo que la "reconstrucción de las infraestructuras (nucleares) no es imposible", aunque aseguró llevará un tiempo.

En declaraciones a la prensa desde Viena, Grossi dijo que el ministro de Exteriores iraní, Abás Araqchí, se comunicó con él el 13 de junio, cuando comenzaron los bombardeos israelíes, y le informó que "ya se habían tomado medidas de protección".
Ante la consulta sobre si los iraníes hicieron referencia a las reservas de 408 kilos de uranio altamente enriquecido, el titular de la OIEA dijo: "No entraron en detalles sobre lo que eso significaba, pero claramente ése era el significado implícito".
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Sobre el regreso a Irán, el titular de la OIEA manifestó que la situación es “muy difícil tras esa guerra de doce días" y reiteró la necesidad de aprovechar la tregua con Israel para negociar una "solución sostenible de largo plazo" que garantice que Irán no disponga de armas nucleares.
Sin embargo, el parlamento iraní aprobó este miércoles un proyecto de ley para suspender su cooperación con el organismo de la ONU “hasta que se garantice la seguridad de las instalaciones nucleares”. "La OIEA, que se negó a condenar siquiera marginalmente el ataque a las instalaciones nucleares de Irán, puso en duda su credibilidad internacional”, argumentó el presidente del parlamento iraní, Mohammad Bagher Ghalibaf.
TV/LT