Miles de personas marcharon en países árabes en repudio a las caricaturas del nuevo número del semanario Charlie Hebdo. Gobiernos e instituciones religiosas calificaron la nueva caricatura del profeta Mahoma como "provocativa y atizadora del extremismo". Las protestas tuvieron como destino las embajadas francesas en esos lugares.
En Amán, capital de Jordania, hubo choques entre los manifestantes y la Policía. Según la agencia EFE, las fuerzas de seguridad dispersaron la manifestación y arrestaron a cuatro personas, que posteriormente fueron liberadas.
“Muerte a Charlie Hebdo”, es el grito que se escuchó en Sudán. Los manifestantes salieron de la Gran Mezquita, en el centro de Jartum, hacia la sede diplomática francesa. “Solicitamos que Francia pida perdón” y “nos sacrificamos por ti, profeta de Dios”, exclamaban los manifestantes.
En Pakistán, se reunieron alrededor de 200 personas frente a al Consulado de Francia en Karachi, la ciudad más poblada del país. Según Reuters, durante las manifestaciones en esta ciudad los manifestantes llevaban palos y piedras. Estos respondieron con ataques a la Policía cuando se intentó disolver la marcha.
En el último número de Charlie Hebdo, se ve en la tapa una caricatura de Mahoma triste, derramando una lágrima y con una pancarta con la leyenda “Yo soy Charlie”. El título de la edición es “Todo está perdonado”. Dibujar al Profeta está prohibido para el Islam, por esta razón el nuevo dibujo -al igual que los anteriores- causó malestar en la comunidad musulmana más religiosa.