INTERNACIONAL
malestar en bruselas

Rebajaron la calificación de la Unión Europea por la crisis

Cumbre. Los líderes europeos se reunieron ayer en Bruselas.
| EFE

ansa/dpa/ap desde Bruselas

La agencia Standard & Poor’s rebajó ayer la nota de solvencia de la Unión Europea de triple A, las más alta, a AA+, provocando una reacción inmediata de Bruselas, que expresó su desacuerdo. “La credibilidad global en materia de crédito de los 28 países de la Unión Europea (UE) declinó”, explicó un comunicado de S&P, que alega que las discusiones presupuestarias entre los países miembros eran cada vez más arduas.
La comunicación de la agencia calificadora cayó en plena cumbre de jefes de Estado y de gobierno en Bruselas, y dos días después de que el bloque sellara un acuerdo sobre la unión bancaria presentado como un avance mayor de la UE para hacer frente a las crisis financieras futuras. La Comisión Europea, órgano ejecutivo de la UE expresó su “desacuerdo” con la decisión de la agencia de calificación, y criticó sus fundamentos.

Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

El ejecutivo europeo “está en desacuerdo con S&P sobre el hecho de que las obligaciones de los Estados miembros de contribuir al presupuesto europeo podrían ser cuestionadas en caso de tensiones “, afirmó el comisario europeo a cargo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, en un comunicado. “Todos los Estados miembros siempre, incluso durante la crisis financiera, aportaron su contribución al presupuesto europeo en tiempo y hora”, agregó.

Desde el punto de vista de la Comisión, la nota de la UE debería atribuirse “en función de sus méritos propios” y Rehn recordó que el bloque no tiene deuda o presupuesto propio sino un presupuesto común compuesto por la contribución de los países miembros.
 Un responsable europeo dijo que se esperaba al anuncio de Standard & Poor’s y reconoció que causó malestar entre los jefes de Estado reunidos en Bélgica.