INTERNACIONAL

Silencio argentino ante la muerte del preso cubano

Qué líderes condenaron el deceso de Orlando Zapata Tamayo.

0219fidelcastro2468tel
| Tlam

La muerte del disidente cubano, Orlando Zapata Tamayo, no tuvo en muchos países de la región el eco esperado. Apenas un lamento del presidente de Brasil, Lula Da Silva, de visita por la isla, se puede leer ayer en los diarios de todo el mundo.

Tamayo fue enterrado este jueves en medio de una suerte de estado de sitio donde se controló, incluso, la asistencia a su funeral. "Estimamos que más del 90 % de los que iban a asistir fueron detenidos o recluidos en sus domicilios", dijo Elizardo Sánchez, vocero de la Comisión de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, reproduce el diario La Nación.

Desde Europa a Estados Unidos, fueron varios los líderes que pidieron por la libertad de los presos políticos en Cuba a raíz del fallecimiento de Tamayo, que estaba en huelga de hambre desde hace 80 días y que había sido condenado por la Revolución en 2003 por "desacato". El líder del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, expresó que "debemos exigir al régimen cubano que devuelva la libertad a los presos de conciencia y que respete los derechos humanos".

Pero Argentina, de buenas relaciones con La Habana, no se emitieron comunicados al respecto a sólo 48 horas de la muerte de Zapata. En otros países como Chile, el electo presidente Sebastián Piñera, expresó su "enérgica condena a las circunstancias bajo las cuales" murió el disidente y reclamó "el fin de toda forma de opresión política en la isla".