Una tormenta invernal en Estados Unidos, la más feroz en décadas, provocó a esta altura 34 víctimas fatales y decenas de miles de hogares sin electricidad este domingo de Navidad, luego de cuatro días de vientos polares que azotaron el centro y el este del país.
El clima extremo, con nevadas y temperaturas de hasta -48ºC motivaron la cancelación de miles de vuelos y volvieron intransitables muchas carreteras en la ajetreada temporada de viajes por las fiestas de fin de año. El condado de Erie, en el noroeste del estado de Nueva York, se vio particularmente afectado.
Siete personas perdieron la vida allí a causa de la tormenta, según declaraciones de Mark Poloncarz, responsable de este condado, durante una conferencia de prensa.
Algunas víctimas fatales fueron halladas en autos y otras en la calle en medio de la nieve. "Es horrible, es una gran catástrofe", graficó el funcionario.
Las autoridades estadounidenses confirmaron al menos 34 muertos debido a esta violenta tormenta que azota el país desde la noche del miércoles. Algunas ocurrieron en carreteras, que se convirtieron en zonas muy peligrosas por el suelo congelado y la poca visibilidad.
El mayor número de muertes fueron reportadas en el estado de Nueva York, ya que al menos doce personas fallecieron por la ola de nieve, informó la agencia Europa Press.
Una tormenta sin precedentes
El alcance de la tormenta no tiene precedentes, y afecta zonas del medio-oeste y este de Estados Unidos, según la cadena CBS. Millones de personas se refugiaron del frío durante la noche y la madrugada. Sin embargo, la tormenta atrapó a algunos residentes dentro de sus viviendas por las acumulaciones de nieve.
Además, casi 1,7 millones personas en todo el país llegaron a quedarse sin electricidad el fin de semana, de acuerdo con el sitio Poweroutage.us y unos 153.000 abonados seguían esta tarde sin energía eléctrica.
Los estados más afectados fueron Maine, Nueva York, Virginia, Washington y Vermont, según la agencia AFP.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, afirmó que es la tormenta "más devastadora" en la historia de Búfalo, donde cayeron cerca de 100 centímetros de nieve. "No puedo exagerar lo peligrosas que siguen siendo las condiciones", precisó Hochul, instando a los vecinos a mantenerse alejados de las carreteras en Navidad.
Este fue el 25 de diciembre más frío desde 1983 para ciudades como Miami, Tampa, Orlando y West Palm Beach.
"Dunas" de nieve y falta de suministro eléctrico
La prohibición de viajar en esta región rige desde el viernes, pero cientos de personas aún se encontraron varadas en sus vehículos.
Para rescatarlos, la gobernadora de Nueva York, desplegó la Guardia Nacional en el condado de Erie y en Buffalo, donde los servicios de emergencia estaban prácticamente paralizados. En principio, se pidió a los residentes que no abandonaran sus hogares porque las rutas permanecerán intransitables.
"Los vientos son tan fuertes" que la nieve forma como "dunas de arena". El fenómeno climático es una "locura", describió este sábado a la agencia AFP Ali Lawson, de 34 años, residente en Buffalo desde hace ocho años.
"Anoche ni siquiera pudimos ver más allá de nuestro porche", apuntó su pareja, Rebecca Bortolin.
Alerta por casos de hipotermia en Estados Unidos
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) confirmó que las temperaturas en el centro y este de Estados Unidos probablemente volverían "a las normas estacionales a mediados de la próxima semana".
Desde la tarde del viernes, la tormenta se ha convertido en una "bomba de baja presión": un choque entre dos masas de aire, una muy fría del Ártico y otra tropical del Golfo de México. Las bombas de baja presión pueden producir fuertes lluvias o nevadas, inundaciones costeras y vientos huracanados.
El tráfico aéreo estaba mejorando gradualmente, luego de casi 1.500 vuelos cancelados el domingo, frente a los más de 3.400 del día anterior, según el sitio de seguimiento FlightAware.com.
La autoridad de aviación estadounidense (FAA) "espera que las interrupciones más extremas hayan quedado atrás", declaró este sábado en Twitter el secretario de Transporte estadounidense, Pete Buttigieg.
Sin embargo, para muchos viajeros la pesadilla continuaba en los aeropuertos de Atlanta, Chicago, Denver, Detroit, Minneapolis y Nueva York.
El hielo en las carreteras también llevó al cierre temporal de algunas de las rutas más concurridas del país, incluida la Interestatal 70, que atraviesa buena parte de Estados Unidos de este a oeste.
Ciudades como Denver o Chicago abrieron refugios para acomodar a las personas sin hogar y protegerlas del riesgo de hipotermia.
La situación en Canadá
Canadá es otra de las regiones afectadas por la tormenta y todas las provincias emitieron alertas meteorológicas.
Cientos de miles de personas se quedaron sin electricidad en Ontario y Quebec, y los aeropuertos de Vancouver, Toronto y Montreal sufrieron cancelaciones de vuelos.
En la provincia de Columbia Británica, las autoridades dijeron que 53 personas resultaron heridas en un accidente de autobús el sábado por la noche, a unos 330 kilómetros al este de Vancouver. La causa del choque permanece bajo investigación.
CA / ED