El avión Air Force Two de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, tuvo que volver a tierra este domingo tras sufrir un problema técnico durante el vuelo. Harris se dirigía a Guatemala en su primer viaje internacional, pactado junto a Joe Biden.
"Estoy bien, estoy bien", aseguró la vicepresidenta mientras hacia un gesto con los dos pulgares hacia arriba tras el aterrizaje, añadiendo, no obstante, que "todos rezamos un poco, pero estamos bien". Tras hora y media, partió a bordo de un nuevo aparato.
"Se trata de un problema técnico. No hay grandes problemas de seguridad" habría exclamado la exsenadora de California, según comentó su portavoz, Symone Sanders. Tanto la tripulación como el piloto a bordo negaron brindar declaraciones sobre lo ocurrido.
Sin embargo, una reportera a bordo del avión, el Air Force Two, describió un "ruido inusual del tren de aterrizaje" poco después de despegar de la Base Conjunta Andrews. Puntualizó en que, aun así, "el aterrizaje (...) fue completamente normal".
Harris visitará también México y, durante su estadía en ambos países, intentará compartir un mensaje "esperanzador" a dos regiones azotadas por el coronavirus y origen de la mayoría de los inmigrantes que llegan a la frontera sur estadounidense.
Haciendo hincapié mayormente en el cruce de dicha frontera, manifestó querer reforzar los lazos bilaterales para desarrollar una estrategia integral que atienda las causas de la migración irregular, uno de los temas más sensibles que enfrenta la Casa Blanca.
"Tenemos que darle a la gente un sentido de esperanza, de que la ayuda está en camino, de que si se quedan, las cosas mejorarán", insistió desde que Biden le encomendó en marzo liderar los esfuerzos diplomáticos en aquella materia.
Además, hablará con representantes de la sociedad civil y líderes comunitarios, laborales y empresariales respecto de la lucha contra la corrupción, el crimen y la violencia, "en particular contra las poblaciones más vulnerables en ambos países".
JFG