INTERNACIONAL

Violento desalojo de partidarios de Zelaya en la embajada brasileña en Honduras

Militares y policías tiraron gases lacrimógenos y pegaron con palos para dispersar a unos 4.000 manifestantes. Ataques dentro de la Embajada.

0922embajadabrasilhondurasefe468
| EFE
En medio de violentos incidentes, con sus rostros cubiertos con pasamontañas y usando gases lacrimógenos y golpes de palos, militares y policías hondureños intentan dispersar a cerca de 4.000 manifestantes, que apoyan al depuesto presidente Manuel Zelaya, de los alrededores de la Embajada de Brasil, donde se refugió ayer, en Tegucigalpa.
 
Las fuerzas de seguridad comenzaron a rodear la embajada brasileña durante la madrugada de hoy, donde permanece Zelaya, y obligaron a retirarse a los manifestantes que pasaron toda la noche frente al edificio, comprobaron periodistas de la AFP. Los soldados y policías hondureños llegaron hacia las 6 de la mañana locales y lanzaron gases lacrimógenos y golpearon con palos a los manifestantes zelayistas para obligarlos a irse de la zona de la legación brasileña, mientras regía en el país un toque de queda impuesto por el régimen de facto.
 
Luego de desalojar a los manifestantes, los militares colocaron equipos de amplificación en dirección a la embajada brasileña y comenzaron a tocar en forma estridente el himno nacional de Honduras, dijo Zelaya a la cadena estadounidense CNN. Los militares pusieron " sonidos estridentes para intentar enloquecer a las personas que están adentro" de la embajada, agregó.
 
Un fotógrafo de la AFP permanece dentro de la legación brasileña, donde el mandatario depuesto buscó refugio ayer tras volver sorpresivamente al país, y confirmó que la zona de la embajada ha sido desalojada. Los militares "armados y enmascarados rodearon la embajada, tiraron gas lacrimógeno hacia la embajada y golpearon a la gente. Fueron bien agresivos con la gente", dijo a la AFP el periodista independiente Nelson Oliva, quien también permanece dentro de la legación.
 
Zelaya, quien puso ayer fin a casi tres meses de exilio luego de ser derrocado en el golpe de Estado del 28 de junio, denunció que los militares "tiraron bombas (lacrimógenas) hacia adentro" de la legación brasileña. " Estamos rodeados de francotiradores", indicó Zelaya. Y agregó: "Ellos tienen las armas y el pueblo está indefenso. Llamo a la ONU a tomar acciones inmediatas para intentar buscar una salida en el menor tiempo posible" a la crisis política en Honduras, agregó.
 

Fuente: AFP