Los días de Juan Miceli como periodista de la TV Pública están contados. Es que las autoridades del canal ya le confirmaron que en diciembre no renovarán su contrato y así le pondrán fin a su ciclo como presentador de noticias, que tuvo su punto más álgido en abril pasado, cuando fue increpado por el diputado Andrés "Cuervo" Larroque. "Hacer buenas preguntas ha molestado", dijo el conductor al confirmar la noticia.
La incómoda situación de Miceli como periodista del canal del Estado quedó en evidencia durante las trágicas inundaciones en La Plata cuando le preguntó a la Larroque por qué identificaban con símbolos partidarios las donaciones anónimas."¡Te espero acá cuando termine el noticiero!", llegó a responderle el legislador.
Sin embargo, las diferencias entre Miceli y la gerencia del noticiero, -integrada por el exnotero de Duro de Domar Carlos Figueroa y Víctor Taricco, ambos militantes de La Cámpora- "venía mal de muchísimo antes", le confió una fuente a Perfil.com.
Un gesto claro de esa tensa relación se dio en noviembre pasado, cuando Miceli fue corrido del noticiero central para conducir, junto a la militante K Agustina Díaz, el informativo del mediodía. "Para un presentador de noticias eso es un descenso", analizaron desde el canal. Al no renovarle el contrato, "La Cámpora se dio el gusto de sacárselo de encima".
Los motivos. Hoy, en diálogo con Radio Del Plata, Miceli explicó que sus superiores no especificaron un motivo puntual. "En la última charla con los gerentes les pregunté qué pensaban hacer y me dijeron que no (seguiría en el canal)". Por eso, "me tomé los días que tenía antes de fin de año".
Consultado sobre su cruce con Larroque, Miceli afirmó que "no soy de los que tira centros, me gusta meter buenas preguntas y eso si claramente ha molestado". El periodista explicó que el "enojo de algún funcionario, son gajes del oficio", pero aún así, a partir de esa entrevista "hubo un tratamiento muy duro en contra mío y se rompió la relación".
Desde los pasillos del canal dieron a Perfil.com más precisiones sobre los presuntos motivos. "Tiene hábitos periodísticos que a la producción le incomodan, como por ejemplo salirse del guión para preguntar otras cosas o poner en aprietos a funcionarios amigos", explicaron.
"Últimamente trataban de que no se cruzara con ningún funcionario porque sabían que no podían tener injerencia sobre lo que iba a preguntar", indicaron.
En sintonía con esta versión, el especialista en análisis de medios Pablo Sirvén contó ayer en el diario La Nación que "los textos que se le pasaban para que los dijera en cámara los sometía previamente a su propia revisión para frenar y no ser vehículo de manipulaciones o groseras exageraciones", lo que "escaldaba" a los gerentes del noticiero.
Pero eso no es todo. El mismo Miceli participó de una "histórica" protesta sindical en la que tres facciones gremiales coincidieron en levantarse contra "los tercerizados y el hostigamiento de La Cámpora", entre otros puntos importantes de la manifestación.
"Para los trabajadores que no coinciden con la línea editorial, Miceli se fue convirtiendo en un símbolo de que se puede laburar igual", dijo una fuente. "Porque una cosa es una tendencia editorial, otra es tergiverzar o lo que es peor: tener que dar información sin tener la fuente, sobre todo para los conductores porque ellos ponen la cara", concluyó.
Por su parte, luego de que el periodista confirmara la noticia, Canal Siete aclaró en un comunicado que "el contrato de Juan Miceli se encuentra vigente". Allí, oficialmente, la TV Pública "desmiente cualquier versión que indique su finalización" ya que "la evaluación de la continuidad de los contratos artísticos y periodísticos de la emisora se realizará oportunamente".
Perfil.com se comunicó con Juan Miceli pero al momento de publicar esta nota no había obtenido respuesta.
(*) De la redacción de Perfil.com | En Twitter @Patocaruso