A principios de mes, la Universidad de Groningen, en Países Bajos, prohibió la representación de la obra Esperando a Godot, de Samuel Beckett, en su centro cultural estudiantil.
Esta versión la realizaban actores amateurs y el detonante de la cancelación fue que el casting para los cinco papeles masculinos convocó solo a hombres, algo que iba en contra de la política de inclusión universitaria.
Recordemos que el propio Beckett dejó explícitas instrucciones para que su obra fuera representada solo por hombres, algo que sus herederos trantan de custodiar y cumplir.
La productora de la obra, Medea Anton (24), estudiante de Física, dijo que la decisión de cancelar pasó por alto el importante papel del equipo que trabaja en la producción de la obra, que sí es inclusivo. “Algunos miembros del elenco y el equipo ya han hecho la broma de que ahora todos estamos esperando a Godot”, agregó.
BL FM