Apenas concluyó el debate de dos horas y media previo a la la segunda vuelta de las presidenciales de Francia, los sondeos señalaban que el presidente Emmanuel Macron le había ganado a su contrincante, Marine Le Pen, candidata por la ultraderecha. ¿La ventaja estimada? Entre ocho y diez puntos.
Las elecciones del domingo serán una suerte de repetición de las de 2017, cuando Macron se impuso en forma holgada a Le Pen. También serán un plebiscito sobre su gestión, cuestionada por la pérdida del poder adquisitivo, los reclamos frecuentes de los chalecos amarillos y la política inmigratoria.
Macron quiso ir a fondo con la supuesta dependencia de Le Pen del poder financiero de Moscú. De Vladimir Putin, en realidad, cuestionado por las atrocidades de la guerra en Ucrania.
Caliente debate presidencial en Francia entre Macron y Le Pen: Rusia, Europa y el velo islámico
Le Pen se defendió con el argumento de la defensa de la independencia de Francia y de la soberanía del pueblo, pero admitió que su partido, la Agrupación Nacional, se vio obligado a pedir préstamos a bancos de Rusia que pagó religiosamente.
Macron la trató de “cínica” mientras Le Pen emparejaba los tantos con el mote de “mentiroso”. Le Pen procuró mostrarse como un ama de casa conservadora que defiende a los obreros y las clases menos favorecidas, víctimas de la arrogancia de Macron. Un modelo de moderación frente a las ínfulas de otros tiempos.
La carta del presidente que aspira ser reelegido fue el recorte de la tasa de desempleo y el retraso de la jubilación hasta los 65 años. Por su parte, Le Pen bajó los decibeles respecto de sus frecuentes críticas contra la Unión Europea y la OTAN. Ella defendió una virtual sustitución del actual bloque continental por una nueva alianza de Estados europeos soberanos, que tendría relaciones privilegiadas con Rusia, mientras Macron insistía en preservar la doble soberanía, nacional y europea.
Macron vs. Le Pen, reservado para mayores
El cierre absoluto de las fronteras, en la lucha contra la inmigración, propuesto por Le Pen, chocó contra la propuesta de una reforma de la política de seguridad interior europea alentada por Macron.
En los últimos nueve días, Macron ganó intenciones de voto y su rival perdió terreno. Antes del debate, el actual presidente rozaba el 55% contra el 45 de Le Pen. Una ventaja menor a la de 2017 en la que pesan tanto el contexto externo, marcado por la guerra en Ucrania, como el interno, en el cual los partidos tradicionales en caída libre pasaron a ser casi espectadores.
AVS PAR