Los líderes del grupo de países industrializados del G7 acordaron ayer la creación del Club del Clima. El nuevo foro intergubernamental tendrá como objetivo acelerar la aplicación de medidas para frenar el cambio climático con el foco puesto en el sector de la industria.
El Club del Clima quedará establecido antes de finales de año. Los miembros colaborarán para mitigar el cambio climático, promoviendo la transición energética y acelerando el proceso de abandono del carbón.
La iniciativa surgió del anfitrión de la cumbre, Alemania. Fue aceptada de buen grado por los otros socios: Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido, Japón, Francia e Italia. Los países que se unan al Club cooperarán para alcanzar la neutralidad climática con políticas concretas, como el refuerzo de los mecanismos de monitoreo de emisiones y las acciones para contrarrestar las fugas de carbono.
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Está previsto que compartan sus buenas prácticas y busquen formas de comparar la efectividad y el impacto económico de sus políticas. Una idea sería aplicar tarifas a las emisiones de dióxido de carbono o la intensidad de carbono. También procurarán impulsar la descarbonización de sus industrias sobre la base de la Agenda de Descarbonización Industrial y del Pacto de Acción para el Hidrógeno, así como a través de la expansión de los mercados existentes para los productos industriales verdes.
El Club del Clima recurrirá a los acuerdos de cooperación para alentar a otros países a actuar contra el cambio climático para abrir el acceso a los "beneficios socioeconómicos" vinculados a una "transición energética justa". Al Club, que tendrá naturaleza inclusiva, podrán asociarse todos los Estados que se comprometan con el Acuerdo de París. Al rubricarlo llamaron a sus socios, los miembros del G20 y a otras naciones en desarrollo y emergentes.
CB PAR