El miembro fundador del Proyecto Suma, Martín Agrest, expresó que "para las personas con trastornos, es más difícil superar la discriminación que la enfermedad psiquiátrica". Además, resaltó que "el padecimiento mental tiene muchos componentes" y la parte social "es fundamental". A su vez, explicó en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9), cuáles son las condiciones que deben darse para la recuperación de quienes están siendo afectados.
¿Por qué hay un estigma y tabú con la enfermedad y la salud mental?
Esto no es algo reciente, sino que tiene mucho tiempo. Personas con padecimiento mental han sido segregadas a lo largo de la historia. Hay un video que está circulando, que se llama "Deconstruyendo la máquina", donde se hacía un análisis sobre el acceso de las personas a una forma de trabajo nueva y, a los que no podían incluirse tan fácilmente, se los separaba.
Quienes tenían determinados tipos de padecimientos físicos o mentales entraban en esa categoría. Por eso digo que tiene siglos y va a dar mucho trabajo de deconstrucción.
¿Hay un temor de que la locura sea contagiosa?
Sí, esta ha sido la estrategia por excelencia para tener lo más lejos posible a "los otros". Cuanto más lejos los podamos tener, se supone que estamos a salvo. Sabemos que esa solución a los problemas funciona muy mal. De alguna manera, es como si estuviesen volviendo por nosotros.
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Hay en el tema de la locura una poetización, banalizando algo que no tiene que ver con la poética. ¿Es algo estrictamente físico?
No sé si diría que sólo es físico porque el padecimiento mental tiene muchos componentes y, sin dudas, lo social es fundamental. El informe que se lanzó para el Día de la Salud Mental hace mucho hincapié en que, para las personas con trastornos, es más difícil superar la discriminación que la enfermedad psiquiátrica.
¿Podríamos decir que hay una parte que es tratable y otra que no?
Diría que todo es tratable y se puede ayudar. Hay distintos recursos y no siempre iguales a lo largo del tiempo. Las personas con psicosis tienen enormes posibilidades de recuperación, de sentirse bien, y contribuir a la sociedad. Para eso se tiene que dar algunas condiciones, como el acceso a los tratamientos, los apoyos sociales, y erradicar el estigma.
No es solo que las personas con neurosis pueden curarse y las que sufren psicosis no. Es mejor pensarlo en términos de la recuperación, es decir, que se puede vivir una vida medianamente plena, ya sea con psicosis o con neurosis.
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¿Existen locuras que son útiles para las personas y los demás?
Sin dudas. Hay mucha gente que se siente a gusto con algunas características que otros consideran como locura.
¿Qué habría que transmitirle a la sociedad y a los actores que tienen que tomar las decisiones?
Según este informe, lo que tendríamos que pensar es que esto no lo resuelve un grupo, sino que debemos hacerlo entre todos. Hay cuestiones que deben revisarlas los gobiernos y otras corresponden a los empleadores, para dar mayores oportunidades. También se pueden hacer cosas en las escuelas para ser más conscientes de lo que significan los padecimientos mentales.
Por último, los medios de comunicación tiene que hacer un gran esfuerzo para no permitir contenido discriminador hacia estas personas.
JL PAR
