El sociólogo Daniel Schteingart se refirió al fallo de la justicia estadounidense que ordenó a la Argentina entregar el 51% de las acciones de YPF a los fondos que ganaron el juicio por la expropiación de la empresa en 2012 y advirtió que acceder a ese pedido sería un “golpazo grande para la Argentina”. “Creo que es más una maniobra de negociación que otra cosa”, dijo en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio JAI (FM 96.3).
Daniel Schteingart es sociólogo, director de Planificación Productiva de la consultora Fundar, y al mismo tiempo es un experto para poder tocar el tema del día, que tiene que ver con YPF.
¿Qué impacto tendría la eventual pérdida de control de YPF sobre el desarrollo de Vaca Muerta y el entramado productivo nacional?
Sí, obviamente, si ocurriera lo que salió en el fallo de ayer —que dudo que ocurra, creo que es más una maniobra de negociación que otra cosa— sería, obviamente, un golpazo grande para Argentina, teniendo en cuenta la relevancia que tiene YPF en la economía argentina.
YPF es la empresa más grande de Argentina si uno lo mide por facturación y por contribución al PBI, y por contribución a la inversión. Para que nos demos una idea, YPF es un poco más del 1,5 % del PBI de Argentina. Es por lejos la empresa que más aporta al PBI.
Daniel, perdón que te interrumpa: 1,5 % es el promedio de la mayoría de las provincias, excepto Córdoba, Santa Fe, Buenos Aires o Mendoza. La mayoría de las provincias aportan 1,5 % al Producto Bruto. O sea que podríamos decir que YPF es como una provincia entera.
Ah, no lo había pensado en ese ángulo y me parece una muy buena lectura. Sí, podría ser una relevancia económica similar a la provincia de Tucumán, ponele, para que nos hagamos una idea.
Históricamente, hace décadas que YPF viene siendo la empresa más importante de Argentina cuando la medimos por facturación. No así por capitalización bursátil, porque ahí MercadoLibre le pasa el trapo, sí. Pero por facturación y por contribución al PBI, es la más importante.
Tiene 22.000 empleados y esto para lo que es una empresa en Argentina, es mucho. Es de las empresas más grandes en empleados. No es la más grande: Trenes Argentinos tiene, si no recuerdo mal, cerca de 30.000. Pero está entre las empresas más grandes por empleados.
Pero cuando vos mirás esos 22.000 empleados sobre más o menos una población ocupada de 20 millones de personas, es el 0,1 %. Es decir que su impacto en la generación de riqueza es 15 veces mayor, aproximadamente que lo que es su contribución al empleo.
Eso es típico de la industria petrolera, que es una actividad que tiene una alta productividad. ¿Qué quiere decir que tiene una alta productividad? Que aporta más al PBI que al empleo. Ahora, esos 22.000 puestos de trabajo que tiene YPF son puestos de trabajo muy, muy bien pagos. La industria petrolera tiene en Argentina los mayores salarios de toda la economía.
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Y además, un dato que por ahí se conoce poco: la industria petrolera es la rama con mayores efectos multiplicadores en la economía. ¿Qué quiere decir esto? Un puesto de trabajo en la industria petrolera genera cinco puestos de trabajo indirectos en otras actividades. No hay ningún otro sector que genere ese efecto multiplicador.
La industria alimenticia genera 3 a 1, la industria automotriz 3 a 1; la industria petrolera, 5 a 1. Y esto tiene que ver, justamente, con que la industria petrolera utiliza toda una amplísima gama de insumos, de maquinarias, de servicios para poder llevar adelante sus operaciones, razón por la cual tiene miles de empresas proveedoras que la abastecen.
Entonces, no solo tenés que ver quizás el impacto directo de YPF, sino también el impacto indirecto a partir de sus vínculos con los proveedores, etcétera. Además, si bien YPF es la principal empresa en facturación y en contribución al PBI, todavía no es la principal empresa exportadora de Argentina.
Sí viene subiendo en el ranking de exportadoras, pero ese lugar todavía lo tienen las grandes cerealeras. Pero todo indica que, si se llegaran a materializar los proyectos de inversión en gas natural licuado de los cuales se viene hablando bastante, hacia finales de la década, no me sorprendería que YPF pase a ser la principal empresa exportadora de Argentina.
Para que nos demos una idea: estimaciones en 2023 indican que YPF exportó más o menos 1.000 millones de dólares, cuando las grandes cerealeras exportaban entre 4.000 y 5.000 millones de dólares. Bueno, tranquilamente YPF podría exportar 10.000 millones de dólares pasado 2030.
Y eso la convertiría en la principal empresa exportadora del país, con un dato interesante: la economía política de la generación de divisas siempre estuvo muy centrada en el agro. Y si el sector petrolero empieza a tener un protagonismo creciente —y una empresa de mayoría estatal como YPF a la cabeza de todo eso—podrías cambiar el mapa de la generación de dólares en la economía argentina.
Daniel, Axel Kicillof advierte que sin YPF no habría existido la inversión estratégica que impulsó Vaca Muerta. ¿Coincidís con él?
Mirá, justo hace un rato lo escuché a Nicolás Gadano, especialista en energía cercano al PRO, y él decía que se podría haber desarrollado Vaca Muerta desde el sector privado. Que es verdad que Repsol no tenía, por ahí, interés en desarrollar Vaca Muerta, que lo quería vender, pero que había un camino para desarrollarla por medio del sector privado.
La verdad que es un poco un contrafáctico. Yo creo que, en términos de discusión, es un contrafáctico.
Sí creo que está claro que hasta 2012 vos tenías un declino de la producción de hidrocarburos en Argentina que generó un estrago en la balanza comercial.
Y eso, post recuperación de YPF —o post nacionalización parcial de YPF—, se empezó a revertir. Es un contrafáctico que, como todo contrafáctico, siempre es sujeto de discusión. Si me preguntás a mí... bueno, si me pongo en bilardista te diría: “Se estatizó y se logró invertir en Vaca Muerta”.
No sé qué hubiera ocurrido si no. Yo me guío por lo que realmente ocurrió, que es que se puso en marcha Vaca Muerta justo después de la estatización. El otro sendero pudo haber ocurrido, pero no sé qué otras condiciones hubieran sido necesarias para que efectivamente ocurriera.
Desde el punto de vista económico, vos decís que el pase del 51 % de las acciones es parte de la presión de una negociación. Hay que ver luego, en la apelación, cómo termina saliendo y qué acuerdo se logra con los acreedores, lo que puede durar años.
¿Tu sensación es que, si terminara costando los 15.000 millones de dólares de los que se habla, terminó siendo un buen negocio igual?
Yo creo que probablemente sí, pero con un costo no deseado muy grande. Sobre todo, cuando el error es de forma —porque en definitiva esto es un error de forma más que de fondo—, más te querés matar.
Es decir, por una cosa que aparentemente es un detalle, o algo que no va al fondo de la cuestión, termina siendo un error muy caro.
Me gustaría que le explicaras a la gente cuál es el error de forma que se cometió.
Una cosa es que tengas que pagar una multa por expropiar, por nacionalizar una compañía. Acá lo que me dicen los expertos es: vos podrías haberla nacionalizado —que sería el fondo de la cuestión—, pero con otro procedimiento. Y si ese otro procedimiento hubiera sido el que se menciona…bueno, ahí se me escapa la parte legal...
Sería darle a la otra parte la posibilidad de igualar la oferta.
Claro. El fondo es la nacionalización, sí. Y vos la hiciste por un camino. Podrías haber hecho la nacionalización con otro camino y te hubieras evitado todo esto.
No, te hubieras evitado una parte, porque igual te habría costado…
Claro, bueno, una parte ya la pagaste —lo de Repsol, etcétera—, pero digo…
Si hubieras hecho el camino alternativo que vos planteás, no hubiera costado 15.000 millones, pero igual hubiera costado algo más en aquel momento
Sí, sí, sí. Pero digo, un poco a eso me refiero.
¿Cómo termina esto, a tu juicio? ¿En una negociación directa con los fondos que compraron el juicio, que finalmente terminará en un acuerdo?
Yo imagino que se va a terminar pagando algo. No creo que ocurra esto de ceder todas las acciones de YPF —el 51 %— a un fondo de inversión extranjero. A priori, creo que en el corto plazo se va a hacer el esfuerzo por mantenerlo en manos del Estado nacional.
Aunque es cierto que el presidente Milei dijo que tiene intenciones de privatizarla en algún momento, no creo que esta sea la forma. Creo que sería bastante escandalosa.
MC/fl